El equipo de gobierno del Partido Popular que gestiona el Ayuntamiento de Dolores está en la cuerda floja y todo apunta a que su continuidad en el poder dependerá del resultado de la sesión plenaria que se celebra hoy. El alcalde, Gabriel Gascón (PP), aseguró ayer que presentará su dimisión si los siete ediles que conforman la bancada de la oposición (5 del PSOE y 2 de Renovación), que cuentan con mayoría de votos, bloquean la aprobación del Plan de Ajuste que se debate esta mañana en el pleno. "Si no sale adelante posiblemente pasemos a ser nosotros la oposición", sentenció el primer edil.

Desde las 9.30 horas de hoy los seis concejales del PP y los siete de la oposición debatirán la aprobación del Plan de Ajuste que exige el Ministerio de Hacienda para que el Ayuntamiento pueda solicitar un préstamo ICO de algo más de 2 millones de euros para pagar facturas atrasadas a proveedores. "No aprobarlo es abocar al pueblo a la ruina", aseveró el alcalde.

Obras

El portavoz del PSOE, Joaquín Hernández, criticó ayer que el equipo de gobierno popular no les presentó ese Plan de ajuste hasta el pasado jueves, un documento que tachó de "vergonzoso" entre otras cosas porque incluye el pago de las obras del Centro Cultural y el Museo de la Huerta. Sendas infraestructuras tendrían que haber sido pagadas con fondos de la Generalitat, pero como el dinero no ha llegado, será el Ayuntamiento quien tenga que sufragar en parte su coste con el préstamo de más dos millones que quiere solicitar ahora, y que conlleva unos intereses del 5%, a devolver en 10 años.

Por parte del grupo Renovación, su portavoz María Dolores Rodríguez aseveró que dicho Plan no contempla los recortes que en realidad necesita el consistorio para garantizar su viabilidad, y trasladó que en la última comisión informativa a este respecto fijaron su voto negativo a que se apruebe.

Aunque los portavoces de ambas formaciones no quisieron adelantar si finalmente votarán a favor o en contra de la aprobación del Plan de ajuste, el voto negativo de ambas formaciones podría poner contra las cuerdas a Gascón y precipitar que abandone en breve el sillón de la Alcaldía.