Reconocer la labor de un maestro que se empeñó en acercar la cultura a los jóvenes campesinos. El pleno del Ayuntamiento de Bigastro nombrará hoy Hijo Adoptivo a título póstumo a José Nieto Nieto, quien ejerció como docente en el municipio entre 1947 y 1965. Los mayores del municipio todavía lo recuerdan como aquel señor que se acercaba a casa de los jornaleros para convencerles de que sus hijos debían de acudir al colegio. Con su paso por las Escuelas Graduadas San Joaquín se triplicó la ratio de estudiantes en la localidad.

El acto comenzará a las 12 horas en el Auditorio Municipal y a este acudirá como invitada de excepción la viuda del maestro, Venancia Cánovas, quien a sus 93 años asistirá por segunda vez a un homenaje de Bigastro hacia su difunto marido, puesto que este pueblo ya le homenajeó dedicándole una calle en 1984. Así, la alcaldesa de la localidad, Charo Bañuls, entregará a sus familiares la insignia y el diploma conmemorativo de la concesión el día en que se celebra el 47º aniversario de su muerte.

Vivencias

La ceremonia contará además con la presentación del libro: "José Nieto Nieto, maestro nacional", un trabajo que sintetiza la vida del docente con testimonios de algunos de quienes fueron sus alumnos.

Uno de los tres coautores del libro, Cecilio Nieto, hijo del homenajeado, recuerda en sus líneas el empeño de su padre en "rescatar de la ignorancia" a los jóvenes bigastrenses para que aprendieran a leer y a escribir y no se vieran condenados a trabajar de por vida en las labores del campo siendo analfabetos.

"Ayudaba a las familias que no tenían dinero y daba clases particulares a sus hijos. Cuando llegó a Bigastro sólo estudiaban cinco o seis personas de cada generación, y durante su etapa elevó ese número hasta los 18 o 20", recordaba ayer.

Cuando se decidió a escribir el libro que se presenta hoy, Cecilio contactó con antiguos alumnos de su padre y dijo sentir una gran "alegría e ilusión" tras ver cómo "se volcaron en recopilar toda la información para que este libro se hiciera realidad". La obra recoge además numerosas fotografías que reflejan el estilo de vida bigastrense durante esos años.