El empresario circense, Gian Franco, quien ayer se encontraba en Lugo de gira y donde ha conocido la polémica suscitada en la Vega Baja por el hecho de que haya varios tigres guardados en un almacén de Cox, explicó ayer al periódico que las fieras tienen toda la documentación en regla, que el Ayuntamiento tiene que ser conocedor de su existencia porque él presentó una solicitud para que estuviera allí -que a día de hoy no ha sido resuelta porque le han pedido más documentación-, "y el alcalde sabe perfectamente que están allí. Puedo entender que ahora lo nieguen por la repercusión mediática".
El propietario añadió que llevó hace más de tres meses a esta ubicación a los animales y que "el Seprona de Orihuela levantó un acta como que todo estaba en regla sin problemas". Gian Franco negó que los animales pueden haber sido objeto de cualquier tipo de venta ilegal, "ahora los tigres están perfectamente identificados porque, incluso, llevan un microchip reglamentario".
Carne
A pesar de que la Policía Local de Cox aseguraba esta semana a este periódico que las fieras están mal alimentadas, Gian Franco lo negó, "el propietario de una tienda de animales de Elche se está encargando cada dos días de llevarles carne de caballo, procedente de Torrevieja, para alimentarlos. Los tigres conocieron antes de Cox otra ubicación en la comarca de la Vega Baja, explicaba el empresario, "antes estaban en San Fulgencio, donde nunca hubo ningún problema".
El empresario insistió en que es el responsable de un negocio "serio, desde hace más de 40 años. Entiendo que los vecinos puedan estar asustados porque son animales que dan miedo, pero tienen que saber que las jaulas están bien asegurada, aunque accidentes siempre puede haber", refiriéndose al hecho de que nadie debería acercarse a las jaulas como medida básica de precaución.
Los vecinos de Cox y Granja no están de acuerdo con que estos animales sigan allí, según confesaron a este periódico, y, de hecho, denunciaron la presencia de los felinos después de comprobar cómo, precisamente, el Seprona no hacía nada para sacarlos de allí.
