El Ayuntamiento ha derribado la puerta principal del cementerio municipal para levantar una nueva. La fisonomía arquitectónica de este acceso caracterizaba al camposanto antiguo y se remontaba a finales del siglo XIX, aunque no estaba protegido en el inventario de bienes del Plan General. La decisión municipal se ha adoptado por motivos prácticos. El recinto necesita obras de reasfaltado para evitar que se anegue con lluvias -el exterior ha quedado a una cota superior al interior- . La máquinaria pesada más efectiva para hacer ese trabajo no cabía, ni por altura ni altura, por el antiguo acceso y tampoco podía entrar por las otras dos más recientes porque están separadas por escaleras y desniveles pronunciados en zonas peatonales.

La actuación también permitirá agilizar y facilitar las obras de derribo de las manzanas de nichos en ruina emprendida a principios de año, como avanzó este diario. Hasta ahora el desescombro se ha tenido que realizar poco a poco. El edil delegado de este área municipal, Javier Montoro, explicó ayer que esta iniciativa no le cuesta ni un euro a las arcas municipales y permiten abaratar las que se realizan en el interior. Se enmarcan en las mejoras propuestas por la empresa que ha llevado a cabo la última ampliación de levante del cementerio. Esta infraestructura municipal es la única en funcionamiento que supera el siglo de historia.

Una ampliación que garantiza los enterramientos

El Ayuntamiento ha concluido las obras de ampliación del cementerio municipal sobre un solar de 2.985 metros cuadrados en la denominada área de levante, lo que garantiza los enterramientos durante décadas. Se han construido 1.422 nuevos nichos y 168 columbarios. El presupuesto de las obras es de 867.000 euros. Además el proyecto ha incluido e acondicionamiento del terreno, jardinería, saneamiento red de pluviales, red de agua potable, red de alumbrado e instalación de iluminación necesaria. También se han construido vestuarios, aseos y una lavandería para los operarios, además de un horno crematorio para restos no humanos. Estas son las obras que han permitido que el derribo de las manzanas de nichos en ruina del antiguo cementerio. El 70% de los restos trasladados no tienen familiares y han sido realojados, con su registro, al osario general. D. P.