Una treintena de personas en bicicleta y piragua participó ayer en el primer "Descenso pirata" por el río Segura a su paso por la Vega Baja para reivindicar un río limpio y una huerta ecológica. La convocatoria, impulsada por un grupo de amigos del municipio de Almoradí, dejó una estampa bastante atípica en la zona que sorprendió a muchos vecinos al encontrarse estas pequeñas embarcaciones surcando el cauce.

La marcha comenzó pasadas las nueve de la mañana desde la plaza de La Libertad de Almoradí, donde se dieron cita aquellos dispuestos a efectuar el recorrido entre esta localidad y la desembocadura del río, en Guardamar del Segura, en bicicleta.

Los ciclistas cruzaron así la pedanía de Las Heredades por el camino de Los Mazones hasta llegar a Formentera del Segura. En dicho punto, y junto al molino de harina del siglo XVIII, se unieron los excursionistas que quisieron seguir la marcha surcando el cauce del río. A modo de protesta, portaron mascaras que les cubrían una parte del rostro para reivindicar una mayor protección y limpieza del río a su paso por la Vega Baja. Los convocantes, que no forman parte de ninguna plataforma, subrayaron que con esta acción tratan de recordar que un río limpio y cuidado puede dar vida a la agricultura ecológica y tradicional de la comarca y servir como lugar de ocio y deporte para la población.

La excursión siguió hasta la desembocadura del río, donde tenían previsto almorzar e intercambiar opiniones sobre el estado en el que se encuentra la huerta del Segura. Los organizadores no descartan repetir la actividad en fechas próximas para seguir concienciando a la población.