La plataforma 'Albatera. No al Vertedero' ha encargado un informe a la Universidad de Alicante (UA) para determinar "el impacto" medioambiental de la planta de gestión de residuos sólidos y la de transferencia que se ubicarían en las poblaciones de Albatera y Cox, respectivamente.

En declaraciones a Efe un vocal-técnico del colectivo, Javier Gamayo, ha avanzado que el objetivo del informe es realizar estudios, "previos y a posteriori", del impacto de ambas instalaciones, a través del "análisis del aire, de la permeabilidad del terreno, de su capacidad erosiva o de las aguas subterráneas".

De entre los aspectos que se evaluarán, Gamayo ha destacado los "estudios hidrogeológicos" para "conocer la existencia de aguas subterráneas".

Este informe, según ha explicado a Efe el presidente de la plataforma, José Antonio Juan, pretende completar "con datos" el recurso contencioso-administrativo que piensan interponer contra la adjudicación de la gestión de basuras de la Vega Baja (Plan Zonal de la zona XVII), que prevé la instalación de un "macro-vertedero" en Albatera y de una planta de transferencia en Cox.

"La intención es que quede reflejado que no se puede sostener una instalación como es el vertedero por sus características y por ubicarse en un lugar incluido en las zonas de protección de aves o de Interés Comunitario", ha señalado Juan.

Ha manifestado que desean un estudio "lo más perfecto posible" al entender que el informe medioambiental incorporado al expediente de adjudicación del "macro-vertedero" era "genérico", es decir, "el mismo que se presentó para Albatera y Torremendo, ubicación inicial prevista para el vertedero.

Por su parte, Gamayo ha dicho que el informe solicitado por ellos valorará el proyecto de impacto ambiental que la empresa adjudicataria del proyecto "debe haber presentado en relación con la planta de transferencia" de Cox y también el que habrá de remitir, "en el plazo de seis meses", del "macro-vertedero" de Albatera.

En todo caso, la citada asociación quiere que "se replantee el tema de la gestión de basuras de la Vega Baja y empiece de nuevo todo el procedimiento" porque, a su juicio, "el Plan Zona XVII no resuelve el problema de las basuras".

Este colectivo ha reiterado en varias ocasiones su preocupación sobre "la adjudicación del macro-vertedero y lo desaconsejable de su ubicación".

Según fuentes de la entidad, el pasado día 10 se firmó el contrato entre el Consorcio del Plan Zonal XVII -conformado por los 27 municipios de la Vega Baja, la Diputación y la Generalitat- y la empresa adjudicataria de este proyecto, la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Cespa-Ortiz.

Desde esa fecha, la mercantil cuenta con seis meses para presentar el proyecto definitivo y durante ese tiempo, según han confirmado las mismas fuentes, la plataforma continuará con "todo tipo de alegaciones".