El equipo de la Guardia Civil considera que ha habido una supuesta prevaricación por omisión de cumplir la legislación a la hora de perseguir delitos contra la ordenación del territorio en el caso de la discoteca Revival por parte del Ayuntamiento de Los Montensinos, pero también deriva la responsabilidad al Ayuntamiento de Torrevieja y su concejalía de Urbanismo. La discoteca ha funcionado con una licencia de almacén agrícola concedida en Los Montesinos desde los años 90 y que no permitía su uso como discoteca, que nunca podría conseguir al estar la instalación dentro del parque natural de las lagunas en suelo especialmente protegido.

El promotor sin embargo levantó la edificación en término de Torrevieja. Cuando un técnico pidió en 2004 que se realizara un deslinde para discernir esta confusión el alcalde de Los Montesinos aseguró que era innecesario. El local de grandes dimensiones, y que ha albergado grandes concentraciones de seguidores de la música tecno, cesó su actividad hace un año. Una vez que la investigación ha podido clarificar que la instalación está en Torrevieja, el jefe de Urbanismo de este municipio, Santiago Romero indicó como testigo a los agentes en mayo pasado que se había notificado al infractor la imposición de multas coercitivas previas a la orden de demolición. Sin embargo, el empresario aclaró a la Guardia Civil en septiembre que no ha recibido notificación alguna.