Las arcas municipales tienen previsto recibir este año dos millones de euros más con respecto al 2014 en concepto de recaudación del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), cuya campaña comenzó el pasado lunes y se extenderá hasta el dos de octubre. Esto supone que el Ayuntamiento recibirá 20.019.000 euros en ingresos por este impuesto, frente a los 18.038.000 euros del pasado año.
Esta subida radica en que el Ayuntamiento ha aplicado la subida del 10% prevista por el decreto del Gobierno Central para este año, según apuntó el edil de Hacienda a este diario, Rafael Almagro (PP). Otra de las razones que explican este aumento para las arcas municipales radica en que este año el censo de viviendas dadas de alta en el catastro ha aumentado en 1.000 inmuebles, pasando de las 104.300 registrados en 2014 a los 105.370 de 2015, según datos facilitados por el Consistorio oriolano.
Mientras que el año pasado el contribuyente pagó una media de 172,97 euros por vivienda, esta cifra ascenderá este año a los 189,98. Almagro apuntó a que esta subida del 10% «será exclusiva para el 2015 y no se aplicará para el 2016».
El IBI es el impuesto más importante que recibe las arcas municipales, pues supone casi un tercio de los 68 millones de euros de los ingresos con el que cuenta el Ayuntamiento de Orihuela. Aun así, esta cifra está muy lejos de municipios cercanos como Torrevieja, que recauda 40 millones.
Una de las razones, como apuntó Almagro, pasa por la gran cantidad de viviendas ocultas, sin dar de alta en el catastro y que «aunque no dispongo de los datos, por lo leído en prensa todos estos años están sobre las 5.000».
La otra razón, radica en que el valor catastral de los inmuebles no se revisa desde 1994, lo que hace que «sobre todo las viviendas del casco urbano paguen un precio muy bajo», apuntó Almagro. Aun así, descartó que el equipo de gobierno vaya a pedir una revisión al alza del mismo, a corto plazo, «y al menos en el suelo urbano, en el rústico ya se verá».
Por tanto, los trabajos se centrarán en detectar esas casas sin dar de altas e incorporarlas al catastro. «Actualmente estamos recopilando los datos de la campaña del IBI de este año.
En el poco tiempo que llevamos en el Ayuntamiento no hemos podido hacer más. Desconozco si existe un informe que cifre y determine el número total de viviendas sin dar de alta, pero estamos en ello», puntualiza el edil.
De las 1.000 viviendas incorporadas al catastro, «prácticamente la totalidad son viviendas regularizadas, casi no hay obra nueva», pese al renovado impulso de la construcción de vivienda turística en Orihuela Costa desde 2013. De hecho, el grueso de la recaudación se centra en Orihuela Costa, donde la recaudación es muy superior por el gran volumen de obra nueva de la última década, con el «boom» inmobiliario.
