El PSOE de Bigastro ha cuestionado el PP en el gobierno de Bigastro por la convocatoria de un pleno extraordinario y urgente ayer por la noche para aprobar varias medidas referentes al IBI o recortes entre otros. El objetivo de la sesión extraordinaria según los socialistas era subir el impuesto del IBI en un 21%, la congelación salarial del personal del Consistorio durante todo este mandato, la eliminación de servicios municipales de los conserjes del centro de salud y la reducción en 120.000 euros destinados a asociaciones sociales, culturales y deportivas.

El PSOE afirman que la alcaldesa Teresa Belmonte «calca a la perfección la forma de gestionar que su predecesora en el cargo Charo Bañuls, convocando plenos extraordinarios y urgentes; saltándose plazos y aplicando medidas abusivas y muy restrictivas». Los socialistas denuncian que el vencimiento vigente para adoptar las medidas se cumplió el pasado 9 de mayo, en plena campaña electoral. Por lo que acusa a el PP, de «saltarse los plazos y ocultar a los ciudadanos sus verdaderas intenciones, que sin duda hubiesen cambiado los resultados el 24 de mayo».

Además, los socialistas afirman que el pleno con los votos del grupo popular, sacó adelante la solicitación de un nuevo préstamo bancario para abonar las cuotas de otra sesión que solicitaron en 2012. Asimismo, el PP aprobó un exceso de facturas del mandato de Charo Bañuls, que supone un gasto superior a 600.000 euros en 2014.

Deuda

La deuda municipal de Bigastro es una de las más elevadas del país en proporción a su número de habitantes -6.700 vecinos-, aunque se ha ido reduciendo en los últimos años. Esa situación se deriva de la gestión del exalcalde socialista José Joaquín Moya, que dimitió tras ser investigado por corrupción en el año 2008.