La Cooperativa Eléctrica Albaterense ha puesto en marcha una serie de actuaciones para proteger a las aves del peligro que supone el cableado eléctrico. En este sentido, se están colocando una serie de anillos a modo de balizas para señalizar la existencia de los transformadores de la zona rural y se han eliminado los cables energizados que pasan por encima de las torretas para evitar las electrocuciones.
Fuentes de la entidad cooperativa explicaron ayer que esta iniciativa tiene la finalidad de «proteger la fauna local de aves rapaces para que no se electrocuten cuanto levantan el vuelo o revolotean alrededor del transformador». Con esta actuación se atiende así a la solicitud de la Sociedad de Colombicultura de Albatera, que había demandado este tipo de protección para evitar así la muerte de palomos de competición en una localidad con una gran afición a ese deporte.
En este sentido, detallan que el trabajo consiste en colocar unos anillos a modo de baliza para señalizar a las aves la existencia del transformador y de los cables, evitando de esta manera que choquen o se posen en el transformador y en caso de hacerlo, este estará adecuado para que no se electrocuten, ya que se han eliminado los cables energizados por encima de la torreta del transformador y se han forrado los puentes del mismo.
Otra consecuencia positiva de implementar estas medidas de seguridad es que redunda en la calidad del servicio «puesto que cuando un ave se electrocuta en un transformador puede producir una avería en el servicio y dejar sin luz a los usuarios, por lo que cumple dos funciones».
El vicepresidente de la Cooperativa Eléctrica Albaterense, Paco Real, indica que «esta actuación se va a llevar a cabo en todos los transformadores de la zona rural de Albatera, los cuales cumplen con la normativa, pero es necesario reforzar las medidas de seguridad para proteger la naturaleza».
Los trabajos los realizan los operarios de la Cooperativa Eléctrica, que han recibido la formación correspondiente y en un principio tienen previsto finalizarlos en un plazo de nueve meses.
