La junta de gobierno local de Orihuela aprobó el jueves, a última hora y en sesión extraordinaria, el pliego de condiciones para sacar a concurso la organización del Mercado Medieval, con seis semanas de margen para que las empresas presenten sus ofertas, se estudien, se adjudique y se inaugure, y eso que la cita se retrasó desde enero, como era habitual, al 8, 9 y 10 de abril.

La edil de Festividades, Mariola Rocamora (PP) reconoció ayer que «vamos con el tiempo justo» y achacó el hecho de que no se haya podido aprobar con antelación a «los numerosos trámites administrativos que sigue el expediente» hasta obtener el pliego. Este aún no ha sido publicado en el perfil del contratante pero «se hará en unos días», dijo Rocamora, por lo que todo apunta a que la adjudicación será «in extremis» ya que hay que tener en cuenta el tiempo que debe permanecer abierto el concurso desde la publicación de las bases para que las empresas presenten sus ofertas, el de subsanación de errores una vez cerrado el plazo y el que tarden los técnicos en baremar para adjudicar finalmente. «Nada nuevo, al final como siempre vamos con el tiempo justo pero lo sacaremos», reconoció la edil. Lo que no trascendió fue el importe del canon que abonará la empresa al Consistorio por el mercado.

La críticas no se hicieron esperar desde la oposición, que apuntó a que el retraso es una prueba más de la «falta de gestión» y constata que «el retraso en las fechas de celebración del mercado que era en enero no se debe a un cambio para mejorar el evento por el mejor tiempo, sino a que no han llegado a tiempo porque no saben gestionar», apuntaron desde el PSOE. Pese a que el pliego de condiciones se aprobó el pasado jueves, la edil de Festividades apuntó a que se lleva trabajando en este expediente desde enero, fecha en la que debería haberse celebrado el mercado si se hubiera cumplido con el calendario habitual. Aun así, Festividades mantiene la fecha para la segunda semana de abril, pues espera cumplir con todos los plazos.