La Generalitat Valenciana ya dispone de las licencias de obra y medioambiental para comenzar la construcción del Centro de Salud del Rabaloche, en Orihuela, y por lo tanto el inicio de los trabajos debería de ser inmediato. Así lo considera el equipo de gobierno oriolano, que informó ayer de la concesión de dichos permisos y eludió cualquier responsabilidad en la tardanza en realizar este trámite alegando que había que cumplir con los plazos legalmente establecidos. Ahora, esperan que el proyecto se ejecute cuanto antes para trasladar un servicio sanitario que lleva 10 años prestando atención a los usuarios en módulos prefabricados.

La concejala de Urbanismo, Begoña Cuartero, explicó ayer que fue el 29 de julio cuando la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte informó a la administración local sobre quién sería el arquitecto responsable de la obra, un trámite que la edil aseguró que era imprescindible para poder culminar el proceso de concesión de esas licencias, que son imprescindibles para poder continuar con el proyecto. Tras esto, el consistorio aprobó las licencias de forma provisional y tuvo que esperar el periodo de 15 días de exposición pública para poder aprobarlas de forma definitiva, algo que se hizo ayer en Junta de gobierno. «En ningún caso el Ayuntamiento ha ralentizado este proceso», aseguró la edil.

El nuevo Centro de Salud del Rabaloche estará ubicado en la Plaza de la Salud. El proyecto se licitó por 1,6 millones de euros, se adjudicó a Dragados S. A. y contempla un plazo de ejecución de 18 meses. El edificio contará con un área de Medicina de Familia, 7 consultas de Medicina General y 4 de Enfermería; Pediatría, con 5 consultas, 2 de enfermería; además, dispondrá de área de Extracciones Periféricas, Trabajo Social, Maternal y Educación Sanitaria. Y está prevista la dotación de una Unidad de Salud Sexual y Reproductiva.

Acusaciones

La concesión de estas licencias pone fin, al menos por el momento, al cruce de acusaciones que se han sucedido en las últimas semanas entre los responsables autonómicos y locales, que se achacaban entre sí la responsabilidad del retraso en el inicio de los trabajos de construcción. El portavoz del equipo de gobierno, Dámaso Aparicio, indicó ayer que de esta manera «el Ayuntamiento da el último paso que le corresponde para que Conselleria inicie las obras, poniendo fin al proceso administrativo municipal».

Tras este procedimiento ligado a la licencia medioambiental, que tiene un periodo de validez de dos años, «esperamos que las obras comiencen ya», prosiguió Aparicio. El mismo dijo que el siguiente paso que deberá realizar la Conselleria será realizar el acta de replanteo inicial.

De igual modo se expresó la edil de Sanidad de Orihuela, Noelia Grao, quien manifestó que «ahora es el momento de que aunque estemos en agosto podamos ver el inicio de las obras cuanto antes porque es lo que estamos deseando todos los oriolanos».