Las obras para cubrir con una cúpula antiolores la balsa receptora de aguas residuales primarias de en la depuradora de Torrevieja comienzan el 5 de junio. Con este proyecto, y si el plazo de dos meses y medio de actuación se cumple, el Ayuntamiento resolverá una de las reivindicaciones vecinales más antiguas que afectan a las áreas residenciales situadas en el entorno de la depuradora: reducir o eliminar los malos olores que emanan de la instalación. Ha sido el alcalde José Manuel Dolón (Los Verdes), el que ha dado cuenta esta mañana de que el día 2 se realiza el acta de replanteo de las obras -el trámite por el que se da por iniciado un proyecto ya adjudicado formalmente-. La construcción estará en marcha en plena temporada estival y finalizará en torno al 20 de agosto.

La entidad de saneamiento de la Generalitat y la Diputación han adjudicado la actuación a la empresa Sigma Infraestructuras SL por 234.284 euros (sin IVA), con una baja de más del 20% sobre el presupuesto de licitación inicial, que era de 314.000. El primer edil, que comenzó a tramitar esta actuación nada más llegar a la alcaldía en junio de 2015, ya ha explicado en varias ocasiones que la depuradora es la única de su entidad que en la Comunidad Valenciana que carece de este tipo de instalación para evitar los malos olores. De hecho, es una de las depuradoras más avanzadas de la provincia -con tratamiento terciario, por lo que sus aguas residuales son válidas hasta para el riego de campos de golf-. Pero en las fases de ampliación con presupuestos multimillonarios, la última y más importante en 2007, se "olvidaron" de incluir la inversión para esta cubierta.

Dolón ha dicho que las emanaciones de la balsa, situada al sur del recinto de la depuradora, frente al plan parcial Mediterráneo, pueden llegar a afectar a más de treinta mil vecinos, en los barrios situados entre al Avenida de Pinoso y Ferrís. Hoy mismo, el alcalde se ha reunido con representantes de empresarios, hosteleros y vecinos de esa zona para explicarles el inicio de las obras. Esos malos olores son especialmente detectables junto al cementerio, al paso de la N-332 y en el plan parcial Mediterráneo y El Paraíso, con vientos de Poniente.

Cúpula prefabricada

El proyecto contempla la instalación de una cúpula prefabricada sobre la principal balsa receptora de aguas residuales de la depuradora, la que almacena el agua que llega directamente del sistema de saneamiento, una vez se han retirado los residuos sólidos, y antes de comenzar el proceso de depuración.

El equipo de gobierno también ha recordado que desde hace dos meses la producción de lodos la producción de lodos que genera la estación depuradora se transporta en vehículos herméticos para evitar que el paso por áreas residenciales provoque malos olores, por lo que esta fuente de molestia para los vecinos también ha sido eliminada, con la colaboración de la concesionaria del ciclo hídrico Agamed. Los lodos se utilizan como combustible para una empresa cementera en San Vicente del Raspeig.