El Partido Popular y Ciudadanos siguen reuniéndose a cuenta de los presupuestos de este año sin llegar a un acuerdo, según confirmó ayer el diario. La situación no parece que se vaya a resolver a corto plazo porque las exigencias que ha puesto sobre la mesa el portavoz naranja, Juan Ignacio López-Bas, no han sido aceptadas por Emilio Bascuñana. Y, precisamente, son estos dos políticos los que más han repetido, hasta la saciedad, de la necesidad que tiene el Ayuntamiento no sólo de contar con presupuestos actualizados sino de que estuvieran aprobados antes del comienzo de cada año, algo que ni de lejos se ha cumplido.

Ayer López-Bas, a preguntas de este diario, así lo admitía y era optimista para una solución a corto plazo, aunque aseguró que con los de 2018 no pasará como estos y comenzará a negociarse a partir del próximo mes de septiembre. Los que actualmente sirven para gestionar la ciudad, que son los de la prórroga de 2016, entraron en vigor dos días antes de concluir ese ejercicio y esta.Así la cosas y pensando en que ambas formaciones puedan alcanzar un acuerdo, en el mejor de los casos no habría cuentas aprobadas y en vigor antes de julio. La oposición ha criticado en reiteradas ocasiones no sólo el retraso en la aprobación sino el hecho de que no se les haya tenido en cuenta para su elaboración, alejando la posibilidad con ello de cualquier consenso en beneficio de la ciudad.