El comité de empresa del departamento de salud de Torrevieja no quiere experimentos. Si la gestión del área sanitaria va a ser pública de aquí a un año, que lo sea de forma íntegra y garantice todos los derechos laborales en una administración pública. Los sindicatos que representan a la plantilla de 1.400 trabajadores han pedido a la Generalitat que no ponga sobre la mesa la creación de una empresa pública para la gestión exclusiva del área que va a rescatar, una opción que la Generalitat ni descarta ni confirma pese a que ya ha comunicado con un documento de 75 páginas a la empresa cómo quiere asumir la gestión del área.

Para los sindicatos el modelo de reversión debería garantizar la integración real de los servicios en el sistema, ofrecer las mayores garantías de continuidad de gestión directa, asegurar el respeto de los derechos laborales del personal laboral y la restitución de los derechos del personal estatutario: movilidad, promoción interna, bolsas de trabajo y ofertas públicas de empleo, entre otros aspectos. CCOO, sindicato minoritario en el comité, «celebra» la decisión del fin del contrato, que además entiende que supondrá el mismo proceso con el departamento Elx-Crevillent a través del Hospital Vinalopó de Ribera Salud. Pero remarca que «le preocupa que la consellera Ana Barceló manifestara en el anuncio de la reversión que la decisión sobre el modelo de gestión pública se decidirá durante el proceso, es decir, en el año que queda por delante».

El colectivo entiende que poner en marcha un consorcio público deja la puerta abierta a volver a privatizar el servicio

Desde la perspectiva del sindicato, «esto deja abierta una puerta a que haya una posible gestión a través de una empresa pública o un consorcio». Algo que impediría la movilidad entre departamentos públicos y «seguiría siendo un departamento estanco».

La misma fuente se plantea dudas respecto a esta fórmula que podría permitir «en un futuro, una nueva privatización del servicio». A los sindicatos les preocupa que la consellera no haya dicho desde el principio que se hará «una gestión pública directa, que es el modelo al que debe aspirar el Hospital de Torrevieja».

Por ese motivo instan a la Conselleria de Sanidad a fijar un criterio para la reversión de los servicios privatizados a la gestión pública para evitar los conflictos y la judicialización de las decisiones de la Administración.

En este sentido la Federación de Sanidad de Comisiones urge al Gobierno Valenciano «a negociar en el marco del diálogo social un modelo de reversión sanitaria que ofrezca las mayores garantías de continuidad de la gestión directa de la sanidad pública, que respete los derechos laborales del personal laboral y que de tranquilidad a la ciudadanía de la comarca».

CSIF pide diálogo y negociación a la Generalitat

 El CSIF, sindicato mayoritario en el comité de empresa de Torrevieja Salud, emitió ayer un escueto comunicado en el que «valora positivamente que se establezca una línea de diálogo con la representación legal de los trabajadores sobre el modelo más idóneo para asumir a los profesionales», tras la reunión que mantuvo la consellera de Sanidad con el Comité de Empresa y la Junta de Personal para informar de la reversión. 


CSIF defiende la necesidad de diálogo y negociación para que la transición sea lo más favorable para todos los trabajadores y remarca que su prioridad «es asegurar la estabilidad y seguridad jurídica de todos los profesionales y mantener los derechos laborales adquiridos.


El Consell evitará la vía Alzira y buscará otra solución para el personal 

Sanidad quiere impedir que los trabajadores tengan la condición de personal laboral fijo a extinguir

El Consell estaría barajando otras opciones para subrogar a los 1.400 trabajadores de Ribera Salud en el departamento sanitario de Torrevieja cuando este vuelva a manos públicas en 2021 y no se repetiría lo hecho en Alzira hace dos años, según confirmaron ayer a este diario fuentes de la Generalitat. Es decir, desde la administración no se optaría por asumir a los trabajadores bajo la figura de personal laboral indefinido a extinguir que es la que se creó para las casi 2.000 personas de la Ribera. Esta es una de las mayores incertidumbres del proceso de reversión de Torrevieja, el segundo que abre el Consell del Botànic y que arrancó el miércoles oficialmente con la notificación a la gestora del área, Ribera Salud, de que no habría prórroga del contrato. 

Y es que desde que se creó, la figura de personal indefinido laboral a extinguir generó dudas jurídicas ya que favorece que los subrogados puedan mantenerse en sus puestos de forma indefinida pese a no haber superado una oposición. De hecho, esa fue la promesa de la exconsellera Carmen Montón que llegó a asegurar que los trabajadores podrían jubilarse en sus puestos ya que estas plazas no se iban a sacar a concurso, solo las de nueva creación con las que se reforzó el departamento. 

Otra opción que se barajó en su día fue la creación de una empresa pública para que los trabajadores se mantuvieran como lo que son, personal laboral, pero tampoco convenció esta vía en su día. Habrá que esperar para ver si se apuesta por esta vía con Torrevieja.

Ribera Salud tiene las mismas dificultades que el resto de áreas para encontrar sanitarios y los capta con incentivos

La plantilla del Hospital de Torrevieja se configuró en 2006 con un proceso de selección en el que se acreditaba la formación de cada uno de los facultativos y sanitarios, sin concurrencia pública. La mayor parte de puestos de menor cualificación fueron ocupados por vecinos de Torrevieja, municipio que aportó la cesión gratuita de los terrenos. Durante estos 15 años la dirección del área y el hospital ha lidiado con enormes dificultades para contar con médicos especialistas y médicos de familia, que solo se ha salvado con el plan de incentivos que valoran la productividad y la eficacia de la atención bajo numerosas variables y con personal de varios países de la UE -Alemania, Polonia, Francia- y Rusia, además de países latinoamericanos. En muchas ocasiones negociando condiciones personales. 

Esta política de Recursos Humanos se refleja en una plantilla joven -menos antigüedad- y menor absentismo laboral. Como contraste, gran parte del personal sufre una importante presión laboral. 

Por ahora, la cuenta atrás para la reversión ya ha comenzado oficialmente con la remisión a la UTE Torrevieja Salud de una resolución firmada por la subsecretaria de Sanidad, Mònica Almiñana. La notificación incluye también las normas para recibir el hospital y al personal de aquí a un año, el 15 de octubre de 2021.