Los años 60 y 70 marcaron el devenir histórico de Almoradí. Dos décadas repletas de cambios políticos, urbanísticos, económicos, tecnológicos y culturales. Todo ello y sobre todo el proceso de mecanización de la agricultura y la vinculación de la localidad con su hortaliza estrella se puede ver en la exposición "Almoradí, señorío de la huerta y joyero de la alcachofa", que hace referencia a un conocido lema que en esa época impulsó y puso en valor la huerta de esta población, de la que se ha llegado a decir que se trabaja con técnica minuciosa de jardinería. Así, el eslogan aparece en numerosos trabajos escolares de los certámenes organizados con motivo de la Semana de la Alcachofa, al mismo tiempo que fue rotulado en algunos de los camiones que recorrían las carreteras de Europa con productos de Almoradí.
La muestra recoge la mecanización que pronto demandó vehículos para el transporte de mercancías por los estrechos caminos de huerta, desde el bancal hasta los almacenes. Por ejemplo, el Motocarro se convirtió en una solución económica. Este curioso y desaparecido vehículo se puede ver en la exposición; en concreto, uno de la empresa madrileña Trimak que fue fabricado en 1962.
También hay antiguas bicicletas, de la colección privada de la Agrupación Huertana del Bajo Segura, y una Moto Guzzi Hispania 65, que marcó la década de los 50 y fue la más vendida en España.
El concejal de Turismo, José Antonio Latorre, también destaca una pieza de coleccionista, el pequeño tractor Hanomag-Barreiros, como el modelo R-350 fabricado en 1964, propiedad de Luis Rodríguez.
A partir de 1955 la empresa familiar de Adrián Viudes, muy vinculada industrialmente a Almoradí, comenzó a fabricar sus propias motocicletas, las Sadrián. En este caso, se puede contemplar una recientemente restaurada -de 125 cc-, que data de 1959 y pertenece a la colección privada de Francisco Argilés.
En este contexto, la exposición se centra en la generación de los baby boomers, hijos de la explosión demográfica que hubo entre 1957 y 1977, periodo en el que nacieron 14 millones de bebés según el Instituto Nacional de Estadística. Una generación que creció con la televisión -primero en blanco y negro y más tarde en color-, vivió la lucha por los valores sociales y conoció la llegada del hombre a la luna, el nacimiento de las nuevas tecnologías, los móviles y los trasplantes de órganos.
Además, hay un espacio que recrea, a modo de homenaje, las antiguas salas de cine, con una vieja cámara donde se proyecta un documental que recuerda al NO-DO, con la historia del empuje agrario y las semanas de la alcachofa de finales de los 60.
La exposición, que se inaugura este sábado en la planta baja del Ayuntamiento, coincidiendo con el VII Congreso Nacional de la Alcachofa, que se celebra durante el fin de semana, se completa con diferentes paneles con amplia documentación gráfica de aquella época y diferentes objetos, la mayoría, desaparecidos, como una botella de los 70 Cynar, una bebida a base de alcachofas, que patrocinaba las Semanas de la Alcachofa de Almoradí.
