El concejal no adscrito en el Ayuntamiento de Torrevieja, Rodolfo Carmona, ha propuesto una serie de mejoras para el Parque Aromático de Torreblanca. Entre otras medidas, ha señalado que la potenciación del arbolado para generar mayor superficie de sombra y la plantación de más flora aromática, con sus preceptivos paneles informativos, serían dos medidas que "sin lugar a dudas supondría un gran salto cualitativo para el disfrute del parque".

También destaca la necesidad de afrontar la sustitución de varios elementos, como algunas papeleras que están en muy mal estado con evidentes síntomas de oxidación, "eso sí, siempre manteniendo la disposición original que tantos años lleva acompañando a los vecinos". Además propone dotar con más mobiliario de juegos el parque infantil, con la instalación de un parque infantil adaptado a personas con movilidad reducida, "porque es de justicia que todos los niños torrevejenses puedan tener las mismas oportunidades de juegos y esparcimiento". Además, detalla el concejal, hay otros aspectos mejorables, como la instalación de barandillas en dos de las entradas que cuentan con unas escaleras muy pronunciadas, para facilitar su uso por parte de personas mayores o con problemas de movilidad. Así como alguna información en las entradas con escaleras, sobre la ubicación de la entrada sin escaleras y accesible para que aquellas personas mayores o con problemas de movilidad puedan acceder por la misma.

Uno de los accesos al parque aromático de Torrevieja sin barandillas y con problemas de mantenimiento

Por otra parte, la situación en la que se encuentra el mantenimiento y desbroce de la vegetación del parque "es otra de las cuestiones que hay que mejorar, e invito a que Eduardo Dolón (PP), acompañado por su equipo de gobierno, paseen por la zona y podrán comprobar 'in situ' la idoneidad de las propuestas que planteo".

La misma fuente mantiene que la actitud del alcalde, Eduardo Dolón, de anunciar actuaciones y proyectos "siempre acaban igual, en el abandono y la inacción de las actuaciones que son necesarias en zonas como el Parque Aromático y otros muchos puntos de la ciudad. Por puros intereses políticos enmarcados en su política de campaña electoral permanente de mucho bombo y poco trasfondo". Y ha explicado que estará "como hasta ahora, vigilante, para recoger las sugerencias vecinales que ante el abandono que está ejerciendo el equipo de gobierno del PP en algunos barrios y urbanizaciones de la ciudad me llegan continuamente".

La vegetación sin mantenimiento cubre el paso de los accesos al parque aromática

En este sentido señala que si el Parque Aromático de Torreblanca estuviera "en mejores condiciones, sería un lugar donde cientos de torrevejenses estarían disfrutando diariamente, pero para ello, es preciso adoptar medidas que mejoren el parque y lo conviertan definitivamente en un foco más de atracción y reclamo turístico de Torrevieja". Asevera el concejal, que el estado de esta zona verde es "el claro ejemplo del más que aparente abandono por todas las concejalías responsables, pues da la sensación de que no se han pasado por allí desde hace mucho tiempo".

Carmona ha desgranado su propuesta para mejorar el Parque Aromático mediante una intervención integral que implicaría a las concejalías competentes "que deben velar por la conservación y mantenimiento de los parques municipales": con esto, "se devolvería la brillantez y la afluencia a un pulmón de la ciudad".

70.000 METROS CUADRADOS PARA UN PARQUE SINGULAR

El parque aromático fue proyectado por la arquitecta Carme Pinós, premio nacional de arquitectura 2021 cuando el Ayuntamiento torrevejense apostó por fichar a arquitectos de renombre para sus actuaciones -con desigual éxito-. Costó en aquel momento dos millones de euros y fue financiado por varias administraciones. Recuperó un barranco clasificado como zona verde en el PGOU que se utilizaba como escombrera. Fue inaugurado en 2009 sobre una superficie de 70.000 metros cuadrados, con una singular distribución de islas que debían recubrirse con especies aromáticas, como el jazmín, lavanda, romero...Además en sus laderas se plantaron otras especies autóctonas mediterráneas como el tomillo. El crecimiento de todas esas plantas ha sido desigual en función del mantenimiento, y el parque, aunque también cuenta con arbolado, mantiene muchas zonas diáfanas bajo el sol. Pese a ser uno de los parques más grandes en el casco urbano, uno de los pocos también con vallado y cierre nocturno, es desconocido para muchos vecinos, al margen de los que residen en el norte la ciudad, en la zona de Torreblanca y Aguas Nuevas, que es donde se ubica. En paralelo a este barranco rehabilitado hay otro también que debería ser zona verde y que sigue abandonado, en el entorno de la calle Minerva.