Xixona da este fin de semana la bienvenida a la Navidad con la mayor oferta de turrones y dulces del país. La XI Feria de Navidad que arrancó el jueves y que se cierra mañana ha sumergido ya a la Cuna del Turrón y a sus visitantes en plena fiestas. El tradicional belén de tamaño natural a la entrada al casco urbano, la decoración, atracciones, «food trucks», más de un centenar de casetas y un amplio programa de actividades ofrecen a los visitantes disfrutar ya de la Navidad... y degustarla. Porque el gran protagonista son los turrones y los dulces navideños, para comprar, catar o conocer cómo se elaboran. De todo ello pueden dar fe las 85.000 personas que se acercaron en la pasada edición a un certamen que no para de crecer año tras año. Ayer, miles de personas ya abarrotaron el centro del lugar más dulce del mundo en un ambiente navideño y muy familiar.

La Feria de Navidad, organizada por el Ayuntamiento y la Asociación de Empresarios, Comerciantes y Profesionales de Xixona (AEX), ofrece talleres navideños para los más pequeños, cuentacuentos, pasacalles, catas, maridajes y demostraciones culinarias, actuaciones musicales y acrobacias, exposiciones, proyecciones audiovisuales y visitas guiadas por la ciudad, entre otras propuestas.

Y como principal reclamo, más de un centenar de casetas que llenan desde el jueves la Avenida de la Constitución-La Plaça con las propuestas de los principales fabricantes de turrones, chocolates y dulces navideños, además de empresas y profesionales de otros sectores, como el helado, junto a pequeños comercios, asociaciones y emprendedores.

Asimismo, para facilitar la estancia en la Feria a las familias con niños pequeños, el Ayuntamiento ha habilitado una zona de lactancia, que permanecerá abierta ininterrumpidamente durante los cuatro días. Está ubicada en el Teatret, donde también se realizan talleres y exhibiciones gastronómicas, proyecciones audiovisuales y recitales.

Las atracciones infantiles y el área gastronómica basada en food trucks de comida mediterránea, se ubican en el aparcamiento anexo al parque Barranc de la Font, frente al Betlemet. Además, un tren turístico navideño recorre todo el perímetro de la Feria de Navidad para mejorar la movilidad y el tránsito, y que es uno de los elementos preferidos por los más pequeños. El trenet tiene una frecuencia horaria de pasos cada 30 minutos y paradas en diferentes puntos del pueblo donde nace la Navidad.