El Ayuntamiento de El Campello espera que en 2022 las fiestas de la Virgen del Carmen tengan la calificación de “interés turístico provincial”, lo que conlleva un reconocimiento explícito de la Generalitat a un evento que cada año reúne a miles de personas para rendir homenaje a la patrona de los marineros. La concejalía de Turismo que dirige Marisa Navarro (PP), ha iniciado los trámites administrativos para alcanzar tal reconocimiento, con un procedimiento que incluye el apoyo de colectivos de todo tipo del municipio, el respaldo de otros municipios de la provincia, un informe sobre el efecto socio-económico del festejo, y un soporte histórico con firma de relevancia.

Los primeros pasos ya se han dado. Marisa Navarro ha pedido a los 141 ayuntamientos de la provincia que apoyen la iniciativa, y ha encargado al historiador Gerardo Muñoz (integrante del Consell Valencià de Cultura), que redacte un informe al respecto. Ese trabajo ya está en marcha, y en las última dos semanas son ya numerosas las adhesiones recibidas del resto de la provincia, según han informado desde el Consistorio.

Como señala la concejal, “ese distintivo nos permitirá poner en valor y promocionar esta festividad tan querida para los campelleros, que congrega a miles de personas, y no solo de nuestro municipio”. De hecho, el 16 de julio es festivo en El Campello en honor a la Virgen del Carmen. “Es un día grande para el municipio, y el reconocimiento institucional es de justicia”, enfatiza Marisa Navarro.

Fue en julio de 1924 cuando El Campello celebró los primeros festejos dedicados a la Virgen del Carmen, después de que el Pósito Pescador comprase una imagen que fue paseada por la playa del Carrerlamar. Por aquel entonces, la fiesta consistía en una verbena, la música de un organillo y una tómbola, además de un concurso de mantones y una “caza del pato” para disfrute de los vecinos del pueblo.

En aquel 1924, se instaló un telón delante del embarcadero en el que se proyectó cine mudo durante varias jornadas. El cronista José Gomis Lledó califica en sus escritos de “inolvidables” esas veladas. El ese año, con motivo de las fiestas, el Pósito Pescador triplicó el número de socios, pasando de 96 a 260.

Desde entonces, las fiestas de la Virgen del Carmen han evolucionado hasta convertirse en un reclamo turístico multitudinario con un programa de eventos amplio y diverso, que ahora espera conseguir el reconocimiento oficial de la Generalitat. Sería el resultado de meses de trabajo de la concejalía de Turismo, que incluye, además de los aspectos ya enumerados, un amplio informe del impacto mediático de las fiestas que se iniciaron en El Campello en 1924.