L a nueva carretera de Alcoy a Benidorm no se encuentra entre los planes inmediatos de la Generalitat. La transformación de la carretera CV-70 en una vía de mayor anchura y mejor trazado, que permita circular hasta a 100 kilómetros por hora, no figura en la información pública que ofrece la Conselleria de Infraestructuras y Transporte, con lo que es previsible que los trabajos no comiencen a corto plazo.

No obstante, la administración autonómica no ha dejado caer esta actuación en el olvido. El proyecto figura en los presupuestos de la Generalitat para este año, con una partida de 891.400 euros, y la misma cantidad se consigna para 2008. Asimismo, esta mejora en las comunicaciones entre el interior y la costa es uno de los nuevos grandes ejes previstos en el Plan de Infraestructuras Estratégicas 2004-2010 de la Conselleria. El nuevo titular del departamento, Mario Flores, también se refirió recientemente a la CV-70 como una de las carreteras a mejorar en un futuro, sobre las que ya se trabajaba con estudios o proyectos. Sin embargo, hasta la fecha no ha habido ningún anuncio oficial sobre las características definitivas que tendría esta vía.

Así, tan sólo en septiembre de 2004 se avanzó que se había iniciado un proceso de estudio técnico para definir la mejora de la CV-70, sin que posteriormente se haya sabido nada más al respecto. Entonces, el que fuera secretario autonómico de Infraestructuras y Transporte, Pedro Marco, señaló que algunos de los aspectos que se barabajan en la nueva carretera eran dos grandes puentes y un túnel de un kilómetro de largo para salvar el puerto de Confrides, la principal dificultad orográfica existente en el recorrido. Con ello, aseveraba, se reduciría a la mitad el tiempo de viaje entre Alcoy y la Marina Baixa.

La CV-70 presenta características de vía local de montaña hasta Benimantell, donde pasa a tener un trazado más suave y amplios arcenes. A partir de La Nucía, y hasta su final en Benidorm, se convierte en una vía parque con dos carriles para cada sentido.