La carretera N-340 entre Alcoy, Cocentaina y Muro, que ha quedado en un segundo plano tras la reciente inauguración de la autovía de El Comtat, perderá dos de sus cuatro carriles en la transformación como ecobulevar. El proyecto que prepara la Diputación, con el apoyo de los ayuntamientos, incluirá la eliminación de dos carriles, que se destinarán a carril bici, espacio para peatones e incluso un tranvía o una lanzadera, cuestión sobre la que hay opiniones diversas.

La Diputación aprovechaba el foro de Suma para acreditar su apuesta por el ecobulevar entre Alcoy-Cocentaina y Muro, algo que evidenciaba el propio presidente José Joaquín Ripoll. Esta carretera de cuatro carriles, habilitada a finales de los años ochenta por el desdoblamiento de la nacional, será la base sobre la que se ejecutará el proyecto, que prevé no solamente mejorar las comunicaciones en el seno del territorio, sino también facilitar la creación de "industrias verdes" en toda la zona.

Jorge Sedano, alcalde de Alcoy, y Rafael Climent, de Muro, han coincidido al explicar que está previsto habilitar un carril bici y sobre todo "un transporte muy rápido entre las tres poblaciones", manifestó el primero. Mientras el alcoyano apuesta de forma concreta por una lanzadera, que permita "unir Muro y Alcoy en diez minutos o menos", el segundo cree más factible un tranvía o un trolebús. En el caso de ser un vehículo sin raíl, previsiblemente se habilitaría "un carril especial, sin semáforos". En principio, se trata de las ideas iniciales, pero "a partir de ahí plantearemos todo lo que se nos ocurra", subrayó Sedano.

En estos momentos la Diputación está preparando los estudios que conduzcan a la licitación del proyecto, cuya envergadura económica se considera será muy importante. Los alcaldes han decidido, como se informó en su momento, utilizar el dinero que aporte Fomento en compensación por la cesión de la carretera para el proyecto del ecobulevar, cuyo mantenimiento posterior asumiría la Diputación.

Alfonso Vergara, presidente de la Fundación Metrópoli, subrayó que esta actuación, en un tramo de carretera de 15 kilómetros, "permitirá cohesionar los tres municipios, a través de la dotación de nuevos espacios urbanos y también con la reconversión de polígonos industriales".

Señalización de Agres y Alfafara

La inauguración del nuevo tramo de autovía de El Comtat, además, está teniendo consecuencias, ya que, por ejemplo, algunas poblaciones consideran que se han quedado en segundo plano por falta de señalización. Así lo ha denunciado el colectivo Salvem la Valleta, que critica que Fomento no haya incorporado a la nueva autovía ninguna señal que indique la dirección por la que se accede a estos municipios. En concreto, anuncia que "vamos a instar a los ayuntamientos de Agres, Alfafara y Bocairent para que reclamen a Fomento y hagan los trámites necesarios para conseguir que el nombre de sus poblaciones aparezca en la señalización del nuevo vial". El colectivo señala que esta carencia es un duro golpe para los usos turísticos, comerciales y de hostelería, que entiende debe paliarse de inmediato.