La Conselleria de Medio Ambiente, en colaboración con el Ministerio, está controlando las evoluciones de los murciélagos de la Cova Juliana de Alcoy por medio de la implantación de emisores. Los técnicos han colocado dispositivos a 30 quirópteros, con el objetivo de comprobar la efectividad de las medidas de protección introducidas en el tramo de autovía situado a la entrada del Barranc de la Batalla, cuya apertura está programada para el próximo día 31 de este mismo mes. Entre las actuaciones llevadas a cabo destaca la construcción de tres pasos elevados con vegetación y un falso túnel de nailon.

Tal y como ha venido informando este diario, el Ministerio de Fomento, a instancias de los informes emitidos por la Conselleria de Medio Ambiente, modificó el proyecto de construcción del tramo de autovía del Barranc de la Batalla en Alcoy con el objetivo de proteger la colonia de murciélagos situada en la Cova Juliana.

Y es que esta caverna está considerada como uno de los santuarios de los quirópteros en la provincia de Alicante. Según la información facilitada por Miguel Ángel Monsalbe, del equipo de seguimiento de fauna amenazada de Vaersa y la Conselleria de Medio Ambiente, la cueva alberga especies como el ratonero gris, el de herradura grande, el de cueva y el mediterráneo. Todas las especies están protegidas, pero merecen una especial atención algunos ejemplares del patudo, que está en peligro de extinción en el territorio nacional, y otros del herradura mediano, que tiene esta misma consideración pero a nivel de la Comunidad Valenciana.

La Cova Juliana está situada junto a la autovía, por lo que con la finalidad de evitar atropellos y prevenir la posible marcha de los murciélagos, se ha procedido a la construcción de tres pasos elevados con vegetación, así como de un falso túnel con cuerdas de nailon, todo ello con el objetivo de que los mamíferos voladores sobrevuelen la carretera sin peligro. Asimismo, se han habilitado dos pasos subterráneos por debajo de la autovía, al tiempo que las farolas de la rotonda de acceso se han situado a baja altura para evitar el efecto barrera que supone para los murciélagos la presencia de luz.

Una vez completadas estas actuaciones, la Conselleria de Medio Ambiente, en colaboración con el Ministerio, ha iniciado un estudio para comprobar la efectividad de las mismas. Según explicaba Miguel Ángel Monsalbe, se ha procedido a la colocación de emisores de 0,4 gramos de peso a 30 murciélagos de las especies de cueva, ratonero gris, herradura grande y mediterráneo.

De lo que se trata, añadió, es de controlar sus evoluciones y, sobre todo, comprobar por dónde pasan. Aunque el estudio se ha iniciado recientemente, los primeros datos apuntan a que los quirópteros, efectivamente, están utilizando los pasos habilitados.

El estudio proseguirá en el momento en que la autovía quede abierta al tráfico el próximo 31 de octubre, momento que se contempla como una auténtica prueba de fuego.

Experiencia pionera

Monsalbe manifestó que, si bien en otros países de Europa ya existen otros ejemplos de pasos elevados en carreteras para proteger colonias de murciélagos, lo del falso túnel de nailon es una experiencia totalmente pionera a nivel internacional.