El juzgado de lo Contencioso-Administrativo 4 de Alicante celebró ayer una vista oral por la reclamación de casi 500.000 euros que ha presentado una constructora contra el Ayuntamiento de Onil, según Efe.

La mercantil Rabel Construcciones demandó a la Corporación local por el impago de los proyectos de urbanización que presentó en 2001 para desarrollar el sector APD-10 del PGOU.

El bufete jurídico que representa a esta mercantil, Cañizares Abogados, explicó que la deuda continuó incrementándose debido a que los sucesivos responsables municipales, «alternándose el PP y el PSOE, fueron guardando las facturas en un cajón».

Los hechos se remontan a 2001, cuando Rabel Construcciones presentó al Ayuntamiento una propuesta para desarrollar el Sector APD-10 del Plan General del municipio.

En febrero de 2002, la Corporación municipal aprobó el Plan de Actuación Integrada (PAI) correspondiente, pero escogió como agente urbanizador a los vecinos de la zona, que se constituyeron en una Agrupación de Interés Urbanístico.

La promotora reclama ahora el pago de estos proyectos y ayer ratificó en el juzgado sus pretensiones, mientras que el Consistorio de Onil y los vecinos se han opuesto a la demanda, según Efe.