El número de personas que han sufrido un ictus por debajo de los 65 años ha aumentado un 25% en los últimos 20 años. Así lo asegura la Sociedad Española de Neurología (SEN) con motivo de la celebración, el sábado, del Día Mundial del Ictus, una afectación que supone la segunda causa de muerte, la primera en mujeres, y que representa el mayor motivo de incapacidad. Según los datos de la SEN, el ictus afecta cada año a unas 10.500 personas en la Comunidad y la mayoría de esos pacientes sufre secuelas, que les inhabilita. efe