La Universidad de Alicante (UA) cuenta desde ayer con un doctor Honoris Causa de marcado carácter europeo, al otorgar este reconocimiento al director ejecutivo de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), António Campinos, «un alicantino de Lisboa», como lo definió su madrina en el acto, Esther Algarra.
El máximo responsable de la euroagencia con sede en Alicante que vela por los derechos de los creadores de marcas, modelos y diseños destacó la necesidad de poner en valor la salvaguarda de estas creaciones desde una esfera global. Defendió que esta fórmula implica más «certidumbre jurídica» en todo el mundo y, además, se facilita la «transferencia de tecnología» desde el ámbito del conocimiento al de la empresa y viceversa, «convirtiendo invenciones en innovaciones, es decir productos exitosos en el mercado».
Campinos fue investido doctor Honoris Causa durante la apertura oficial del curso académico. El director ejecutivo de la EUIPO habló de manera extendida de los progresos tecnológicos de los últimos tiempos y de cómo afectan a las personas, a la privacidad, a los derechos de autor y a la producción industrial, entre otros aspectos.
Así, citó cuestiones como los avances en robótica, el desarrollo de las tecnologías de la información a través del «big data» que «exige nuevas respuestas a nivel de protección de datos personales y de nuestra privacidad» o el «mundo de oportunidades» para la industria que supone la impresión 3D. Todo esto, añadió, lleva a «la necesaria reflexión a la que nos obligan las invenciones», las cuales, agregó, «son el resultado de la síntesis de distintas ciencias que actúan en los confines de la vida humana».
En esta línea, recordó que desde la EUIPO se ha colaborado de manera activa con los gobiernos de los países de la UE y los propios usuarios de la euroagencia para la modernización de las oficinas nacionales de propiedad intelectual. Esto ha permitido, señaló, que el conjunto de la Unión sea hoy «un bloque sólido» en esta materia, «compartiendo niveles de modernidad equivalentes en lo que respecta a la prestación de servicio público de propiedad intelectual».
Sobre esta misma cuestión abundó al defender que «una arquitectura de propiedad intelectual que maximice su aportación a la innovación, al PIB y al empleo, no se conseguirá a nivel nacional, pero tampoco podrá llevarse a cabo sin contar con los países». Por ello, insistió en la apuesta por los «bloques regionales de propiedad intelectual», los cuales tengan «un estándar de modernidad equivalente entre sí».
Campinos también puso en valor el desarrollo, desde 1994, del Magister Lucentinus, un posgrado sobre propiedad intelectual que se imparte gracias a la colaboración entre la EUIPO y la Universidad de Alicante. El director ejecutivo de la euroagencia mostró su «orgullo» por que haya sido considerado este año el mejor máster en este campo.
Lo puso como ejemplo de la «larga y fructuosa cooperación» entre ambas instituciones, a la vez que recordó que en el Magister Lucentinus trabajan casi una veintena de profesionales de la EUIPO. Además, esa interacción se prolonga después del curso, ya que «desde siempre, nuestra Oficina ha acogido como becarios y funcionarios a antiguos alumnos», y no ya sólo del citado máster, sino de la UA en general. Por ello, recalcó, «este fantástico reconocimiento» como Honoris Causa «también les pertenece» a todos esos trabajadores de la euroagencia.
El homenajeado también se felicitó de «haber luchado contra viento y marea durante tres años para que se creara el primer doctorado conjunto en Propiedad Intelectual», el Innovation Society PhD Programme, financiado por la Comisión Europea en el año 2016. Campinos destacó que «es el primer Doctorado conjunto de propiedad intelectual que se ha creado en Europa y en él participan cinco de las universidades más prestigiosas que integran la red de Institutos Europeos de Propiedad Intelectual, (EIPIN)». Entre ellas está la UA, a través del Magister Lucentinus.
El máximo responsable de la EUIPO señaló que todos esos logros «no me pertenecen sólo a mí, sino a todo un equipo de gran talento, empeñado en cambiar una pequeña parte de nuestro mundo por algo mejor y más grande». Campinos retomaba así, ya hacia el final de su discurso, una idea expuesta al comienzo, la de que el nombramiento como doctor Honoris Causa, recibido «con gran emoción e ilusión», pertenece también «a mi familia, a mis amigos y a mis compañeros».
Referente para Alicante
La madrina de António Campinos en su investidura como doctor Honoris Causa fue la secretaria general de la UA, Esther Algarra, que, entre otras cuestiones, destacó de él que su labor «ha conseguido que la generalidad de los alicantinos sepan qué es la EUIPO y qué hace», logrando además «una integración saludable y sostenible» de las instalaciones de la euroagencia en la ciudad de Alicante. También alabó su «gran sentido de la responsabilidad e intuición innata», así como su «firme convicción europeísta» y su vinculación con la Universidad de Alicante.
Algarra citó «la especial importancia de las marcas, dibujos y modelos» como elementos identificadores de productos y servicios, y en la necesidad de proteger los derechos de sus autores. En este sentido, destacó que la EUIPO es «una institución de alto nivel tecnológico», así como las medidas implantadas «para ser una oficina moderna y transparente».
Esta labor, consideró, ha sido decisiva para que en la euroagencia se tengan registaradas más de 150.000 marcas y más de 100.000 modelos y diseños.
El rector, Manuel Palomar, también se refirió en su alocución al papel de la EUIPO y de Antònio Campinos en particular en la integración de la euroagencia en la ciudad de Alicante. Entre otros aspectos, destacó cómo el impacto total de la institución sobre el valor añadido bruto de la Comunidad ha pasado de 239,6 millones de euros en 2009 a 376,2 en 2015.