En la Comunidad Valenciana se han registrado en el último año 476 nuevos casos de VIH. Según las cifras de la Conselleria de Sanidad, el 83,2% de estos nuevos diagnósticos corresponden a hombres, siendo las tasas para hombres y mujeres de 13,0 y 2,5 por 100.000 habitantes, respectivamente. Por grupos de edad, las tasas más altas se registran entre los 20 y los 39 años y las más elevada corresponde al grupo de entre 25 y 29 años, tanto para hombres como para mujeres, con un valor de 23,5 casos por 100.000 habitantes. El 76,4% de los nuevos diagnósticos del año 2017 tiene su origen en la transmisión sexual, siendo la más frecuente en hombres que tienen sexo con hombres (HSH), que supone un 55,2%, seguida de la transmisión heterosexual (21,2%), personas que se inyectan drogas (PID), que fue del 5,0% y del resto (16%) no se tiene información sobre el mecanismo de transmisión. Teniendo en cuenta solo los casos con mecanismo de transmisión conocido, la proporción de casos de transmisión sexual se eleva al 91%.
La conselleria de Sanidad recuerda que existen otras vías de transmisión de la enfermedad, por ejemplo con el contacto directo de la piel herida o las mucosas con líquidos corporales como sangre o semen. También por el uso compartido de agujas o jeringas contaminados de por el virus. También por transfusión de sangre contaminada o sus derivados.
El VIH también puede transmitirse de la madre al hijo durante el embarazo, parto o lactancia. Sin la existencia de medidas preventivas, señala Sanidad, «el riesgo de transmisión del virus de madres seropositivas a sus hijos es, en ausencia de lactancia, aproximadamente del 25% y en presencia de ella del 35%. Otra vía de contagio es la exposición del personal sanitario a sangre infectada por accidente con agujas u otros objetos punzantes. La conselleria recuerda que si bien es posible la presencia del virus en saliva o lágrimas «no se han notificado casos por el contacto con estas secreciones».