La comunidad china en la provincia de Alicante, donde reside una colonia de más de diez mil personas, está profundamente preocupada por la psicosis que en la población española pueda generar el coronavirus. De hecho, desde los negocios chinos admiten que están teniendo menos clientes desde que la enfermedad saltó a la primera plana de la información internacional, tanto entre comerciantes al por mayor, como restaurantes y bazares.

Entre los inmigrantes chinos que hablan bien castellano hay una mayor tranquilidad pero entre quienes no dominan bien el idioma hay algo de miedo a salir a la calle por si alguien les mira o sufren algún tipo de actitud xenófoba. También agradecen a muchos clientes españoles que "viene a preguntar cómo estamos y que sienten mucho lo que está pasando. Pero siempre hay excepciones", explica Alessandro Zhou, comerciante.

Los ciudadanos chinos señalan que no hay que tener miedo puesto que en España solo ha habido un caso confirmado, además en Canarias. "Llevamos viviendo aquí diez, veinte, hasta treinta años, y somos casi compatriotas. Sabemos que tenéis miedo, por eso no salen a la calle cuando vuelven de China durante 15 días, en los que se quedan en casa, por la salud de ellos mismos y de todo el país". "Además, todos somos hermanos y esto ha salido en China como podría haber salido en otro país".

La comunidad china en España se ha sumado a la campaña #nosoyunvirus para prevenir el racismo y la xenofobia que empieza a despertar la enfermedad, sobre todo en puntos del Sureste asiático.