La crisis del coronavirus ha desbordado económicamente no solo a los trabajadores y a las empresas, sino que también supone todo un desafío sin precedentes para las administraciones más cercanas al ciudadano: los ayuntamientos. En este caso, los principales consistorios de la provincia apenas dan abasto para atender todas las necesidades sociales que vienen surgiendo, así como las de las mercantiles y autónomos a través de la catarata de ayudas, bonificaciones, subvenciones, exenciones o deducciones fiscales que vienen reclamando.
Ante todo ello, los grandes consistorios de la provincia estiman que van a tener que destinar solo en este año más de 60 millones de euros para la reconstrucción de sus respectivos municipios, todo ello sin contar con lo que van a dejar de ingresar en tasas e impuestos. En definitiva, presupuestos aprobados para 2020 que de poco van a servir cuando se diseñaron en 2019.
Así las cosas, en el Ayuntamiento de Alicante se ha aprobado un paquete de medidas de 13 millones, pero ya está abierto a ampliarse. Con respecto a las ayudas a autónomos, micropymes y pymes, el plan municipal para esta cuestión destina una subvención de cinco millones de euros. Además, se ha previsto un paquete de 700.000 euros para apoyo y promoción al sector turístico y comercial con el objeto de reforzar la marca Alicante
En estas línea, el ejecutivo local presidido por Luis Barcala está en el trabajo de modificar el presupuesto para encontrar acomodo a esta cantidad y a la espera de que el Gobierno responda sobre la petición de todos los ayuntamientos de poder hacer uso de todo el remanente de tesorería, y no solo de un 20%.
Remanentes
Precisamente si esto último se permitiera, el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, estaría dispuesto a destinar a la recuperación prácticamente los 20 millones del remanente del pasado año.
No obstante, de momento este Consistorio va a destinar entre 4,4 y 5 millones de euros para paliar los daños del covid. Una gran parte será para ayudas sociales a las personas más necesitadas del municipio. Además, se van a aprobar en torno a los 600.000 euros en ayudas para autónomos, aunque aún esta partida no está cerrada y puede aumentar. El consistorio oriolano, por otro lado, ha hecho una rebaja del IBI que ronda el millón de euros.
Elche es también otra de las numerosas localidades que están en esa petición de tirar de todo el remanente de tesorería. Hasta que eso llegue, calcula que en 2020 podrá disponer de entre 15 y 20 millones de inversiones para que tengan un efecto dinamizador.
«Está previsto un calendario de reuniones y abordaremos, con diálogo y realismo, la viabilidad de todas las iniciativas que se presenten, encaminadas a la reactivación económica de la ciudad», manifiesta Carlos González, el alcalde ilicitano.
Desde Elche aseguran que ha sido el primer ayuntamiento de la Comunidad que ha puesto sobre le mesa un plan de reactivación pactado con los agentes sociales.
Ahora mismo están en marcha planes por valor de cerca de cinco millones de euros para impulsar el comercio y la hostelería y se han creado cuatro mesas de trabajo para la reactivación económica y social con los sindicatos y la patronal: mesa Verde para el desarrollo sostenible; mesa de Impulso Social; mesa de Impulso Económico; y mesa de Proyectos Estratégicos.
Por su parte, Torrevieja tiene previsto un gasto o inversión, según se mire, de más de 7,5 millones de euros en la reconstrucción post covid. Parte de ese dinero ya se está invirtiendo en el caso de gasto social para ayuda de las familias más necesitadas. El alcalde Eduardo Dolón anunció una primera batería de medidas para afrontar el impacto económico de la pandemia en la ciudad por valor de 5 millones de euros.
Benidorm, mientras maneja la cifra de 4 millones de euros para la recuperación por el covid-19, cuantía que incluye entregar ayudas directas a familias (entre 1 y 1,2 millones) así como a empresas y autónomos (cerca de 2 y 1,2 millones). También están trabajando en un plan para responder a la pandemia desde ahora y con miras a la primavera 2021. Esperan tener listo dicho plan, con las inversiones que realizarán, en breve
La localidad benidormí al frente de la cual está Toni Pérez,que prefiere no manejar el término «reconstrucción» y sí el de «recuperación», pone énfasis en que ha entregado y sigue entregando menús diarios a más de 800 escolares dentro del programa «menjadors a casa». De igual manera también ha hecho llegar menús para los siete días de la semana a 450 familias a raíz de la crisis, aunque el Ayuntamiento aún no ha cuantificado su aportación en este par de medidas porque también ha contado con otras ayudas.
Brújula
En Elda, el Ayuntamiento tiene en marcha un plan económico y social de, por el momento, 2,2 millones de euros. De la cantidad prevista 1,4 millones de euros se destina al ámbito social y el resto es para el tejido económico. Su alcalde, Rubén Alfaro, incide en que es un fondo que procede de una amplia reestructuración presupuestaria, tanto del Ayuntamiento como de sus organismos autónomos, y que tiene como objetivo facilitar todas las ayudas que necesiten.
«Si hemos podido afrontar esta importante inyección económica es gracias a la salud económica de nuestro ayuntamiento y de sus cuentas. Gracias a que tenemos un importante superávit y un muy buen presupuesto que nos va a permitir calibrar la brújula en cada momento», agrega.
Mientras, el plan de ayudas de Alcoy asciende a 3 millones. Entre las ayudas directas previstas por el Consistorio que gestiona Tony Francés destaca el apoyo a micropymes y autónomos y un nuevo aplazamiento de tasas e impuestos, cuestiones éstas que prácticamente son comunes en líneas generales en todos los ayuntamientos.
«No sabemos ni cuándo ni cómo saldremos de esta situación», por lo que «es muy posible que tengamos que ir ampliando o adaptando estas ayudas en los próximos meses», insistía el primer edil alcoyano.
Dénia tiene previsto un primer paquete de ayudas de 2 millones pero da por seguro que se ampliará, ya que la administración local que preside Vicent Grimalt trabaja sobre un documento vivo.
Oxígeno para los pueblos de menos de 30.000 habitantes
Oxígeno para los pueblos de menos de 30.000 habitantes Los limitados recursos de los municipios más pequeños de la provincia obligan, como casi siempre y en este caso más, a depender de la inyección de fondos de la Diputación. El pasado mes de marzo se aprobó el reparto extraordinario de tres millones de euros entre las localidades de menos de 30.000 habitantes para ayudarles a hacer frente al gasto social originado. Además, en mayo se garantizó el reparto de seis millones entre todos los municipios para ayudar en concreto a los autónomos por el coronavirus.
