El Hospital de Sant Joan, La Fe de València y el Centro de Transfusión de la Comunidad Valenciana necesitan donantes que hayan pasado el covid para avanzar en la investigación de los posibles beneficios de la infusión de plasma de exenfermos en actuales contagiados. Y también medios para gestionarlos y llevar a cabo su estudio. Durante esta semana pasada, la escasez de unidades ha interrumpido las transfusiones como terapia contra el virus para algunos grupos sanguíneos. «Hemos acabado el que tenemos», explicaba José Antonio Fernández, jefe de Hematología de Sant Joan.

«Teníamos una cantidad suficiente, más de 400 unidades de reserva, pero con toda esta situación nos hemos encontrado con que ha ido faltando», explica Francisco Jover, responsable de la Unidad de Enfermedades Infecciosas (UEI) del Hospital de Sant Joan. Por el momento, este ensayo clínico iniciado en el mes de mayo ha transfundido plasma de exenfermos de covid a cerca de 450 personas, según explica Jover, copromotor del trabajo.

En la primera ola, las personas que aceptaban participar en este estudio como donantes, eran, por lo general, autoridades. «Participaron policías, guardias civiles... Había mucho voluntarismo», explica Jover. En estos momentos, la saturación del personal que maneja el estudio, que al mismo tiempo realiza su trabajo asistencial, y la ocupación de los pacientes recuperados, dificulta el reclutamiento. Algunas bajas del personal por contagios complican también la gestión del listado de posibles donantes con el que cuentan los investigadores. Algunos sanitarios, ofrecidos de manera voluntaria, esperan a ser llamados.

La falta de plasma se ha prolongado durante unos días, con solo muestras de sangre disponibles del grupo A. Sin embargo, el pasado viernes el centro hospitalario alicantino aumentaba el número de sangre de este tipo. «Contamos con unidades para cubrir el 85% de las solicitudes», señala el responsable de la UEI. Once pacientes recibieron este tratamiento en la jornada del pasado día ocho.

Los resultados científicos de este estudio, todavía en fase dos, no se conocen por el momento, aunque una pequeña muestra analizada y la percepción de los sanitarios podría concluir en beneficios para los pacientes contagiados de covid que recibieran este tratamiento en la fase más temprana posible de la enfermedad. Un total de catorce centros de la Comunidad Valenciana, diez de ellos en la provincia de Alicante, participan en esta terapia.

Los requisitos para las personas que han superado el covid y quieran ser donantes , y que deberían ponerse en contacto con el Centro de Transfusión, es ser varón de entre 18 y 65 años, sin enfermedades crónicas, que hayan sido sintomáticos, que no hayan pasado por un cáncer, y que nunca hayan pasado hepatitis o sífilis. Las mujeres, tal y como explica Fernández, jefe del servicio de Hematología, no pueden donar porque podrían tener anticuerpos dirigidos a algún componente sanguíneo, lo que podría suponer una reacción transfusional.

Solo dos reacciones adversas entre los 150 primeros pacientes del estudio

La primera muestra del proyecto cuenta con 200 casos registrados hasta noviembre

Cerca de 450 pacientes transfundidos. Esta es la cifra del número de personas a las que se les ha transfundido plasma de pacientes que han superado el covid en este estudio que se realiza en centros de la Comunidad Valenciana. De ese total, son 200 casos registrados hasta el mes de noviembre los que forman parte de la primera muestra para el análisis de datos. Este análisis está todavía en curso, pero con 150 casos ya estudiados, Francisco Jover, responsable de la Unidad de Enfermedades Infecciosas (UEI) del Hospital de Sant Joan y coproductor del estudio, arroja una percepción, aunque, recuerda, todavía sin evidencias. «Es muy probable que el plasma sí que tenga efecto, lo más importante será saber en qué momento es más seguro», explica el sanitario. Hasta el momento, Jover explica la sensación de mejoría que se percibe en los pacientes, y cuenta que solo hay dos casos adversos entre los de la primer muestra. Un estudio realizado por la argentina Fundación Infant revela que el uso de plasma sanguíneo de pacientes recuperados es efectivo en mayores de 65 años con covid, ya que reduce en un 60% la posibilidad de que necesiten oxígeno.