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Ecologistas y vecinos alegan contra la declaración de interés comunitario de una nueva planta de residuos de construcción y demolición en Fontcalent

Los firmantes aluden al impacto del proyecto sobre la cuenca hidrológica y paisajística del Saladar y señalan que la zona no debe acoger más instalaciones de este tipo

Vista aérea de la parcela sobre la que se prevé la planta de residuos de construcción y sobre la que se han presentado alegaciones.

Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) y vecinos de la ciudad de Alicante han presentado alegaciones ante la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad para que no se otorgue la declaración de interés comunitario a una nueva planta de residuos de la construcción y demolición en la partida de Fontcalent, sobre una parcela de 21.000 metros cuadrados. Advierten del impacto territorial, ambiental y paisajístico que tendría esta instalación, así como del riesgo de que la partida se convierta en "un gran y caótico vertedero de residuos".

Los firmantes plantean que la partida de Fontcalent no debe acoger "más instalaciones molestas e insalubres" y debe detenerse la proliferación de nuevas plantas de residuos en esta partida, "para revertir la espiral de deterioro de su calidad de vida, ambiental y paisajística", y que debe primarse el mantenimiento del medio rural, "tal y como establece el vigente Plan General de Alicante". Por ello, piden que se realice una valoración acumulativa del impacto territorial de todas las instalaciones existentes y previstas en la zona.

Asimismo, instan a la Conselleria a valorar el impacto de la nueva planta sobre el acuífero subyacente y la zona húmeda y la microrreserva de flora del Saladar de Fontcalent. La parcela afectada, denuncian, se sitúa sobre la cuenca hidrológica y paisajística del Saladar, un humedal que cuenta con una ficha en la sección de patrimonio natural del provisionalmente aprobado Catálogo de Protecciones de Alicante. A su juicio, el impacto de la nueva planta sobre el humedal será negativo por posibles fugas de aguas residuales y del lavado de camiones, así como de lixiviados e incluso de combustibles de un surtidor de 5.000 litros que se incluye en las instalaciones proyectadas

A esto se une, añaden, que todos los terrenos de la parcela presentan una alta permeabilidad, tal y como queda acreditado en la cartografía del Generalitat. Señalan también que unos 4.500 metros cuadrados de la parcela están afectados por una zona de peligrosidad geomorfológica que el Patricova asocia al humedal del Saladar de Fontcalent, con el agravante de que parte de la nave de tratamiento de residuos, la balsa de lixiviados, las zonas de acopio de áridos y la balsa de decantación se sitúan dentro de dicha zona de peligrosidad.

En otras alegaciones denuncian que no se considere la contaminación atmosférica que puede producir la manipulación de residuos al poder contener materiales pulverulentos, que no se analicen alternativas de emplazamiento o que se pretenda ignorar que existen en el entorno numerosas viviendas consolidadas en suelo no urbanizable, algunas a menos de 300 metros. Por ello plantean alternativas viables de emplazamiento en polígonos industriales cercanos como Pla de la Vallonga, situado a poco más de 2.000 metros de la parcela para la que se solicita declaración de interés comunitario, o Las Atalayas, situados a 3.500 metros.

Por último, denuncian que se eliminaría arbolado de secano en los terrenos de la parcela, como algarrobos y olivos, y que de hecho ya se han arrancado árboles para lo que, según indican, parece un aparcamiento de camiones, la legalidad del mismo han pedido a la Conselleria que se investigue. Aseguran, además, que no se ha incorporado al estudio de integración paisajística ni el resultado del preceptivo proceso de participación pública ni simulación visual alguna del paisaje resultante tras la construcción de la planta, y rechazan la propuesta de la empresa de que la declaración de interés comunitario tenga el máximo previsto por ley, 30 años, reiterando que debe denegarse. 

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