El Sindicato Médico critica la escasez de médicos contratados por la Conselleria de Sanidad para reforzar Atención Primaria dentro de los denominados contratos covid. Según el Cesm la conselleria ha contado con 191 nuevos médicos de familia y 9 pediatras para todos los centros de salud de la Comunidad Valenciana, "lo que equivale a que cada centro de salud se ha reforzado con menos de un médico o pediatra". Además, según añade el sindicato un elevado número de estos contratos, "son contratos llamados de atención continuada, es decir de médicos contratados con anterioridad a la pandemia exclusivamente para hacer guardias. Médicos que ya estaban trabajando para el sistema desde antes de la pandemia, y que han visto “mejorado” transitoriamente su contrato al modificarlo a un contrato por acumulo de tareas, que es lo que ofrece la administración en estos momentos".

Para el Cesm existe una clara descompensación entre el número de médicos contratados y enfermeros en Atención Primaria, categoría que se ha reforzado con 1.013 profesionales, "es decir casi 6 enfermeros por cada médico cuando las consultas médicas están completamente desbordadas y las cargas de trabajo en absoluto se han multiplicado seis veces más en enfermería que en Medicina Familiar o Pediatría".

El Sindicato Médico también critica la forma en la que se han gestionado los refuerzos en Urgencias. "Afirman haber contratado a 241 médicos más, aseveración absolutamente falsa, ya que se han limitado a convertir en contratos de acúmulos de tarea, lo que conocemos como “contratos Covid”, a aquellos médicos que tenían contratos precarios de atención continuada, o contratos “basura” como se les conoce popularmente. Es decir, médicos contratados desde hace años en los Servicios de Urgencias Hospitalarios para hacer exclusivamente guardias, aunque la realidad es que actuaban indebidamente como personal de plantilla". En este sentido, añade el sindicato, "el crecimiento real en este colectivo ha sido prácticamente nulo".