El bipartito de PP y Ciudadanos desbloquea el Presupuesto municipal para 2022. Eso sí, con cesiones drásticas en áreas sociales. El gobierno municipal ha contado con el aval de Vox, en forma de abstención, en la Comisión de Hacienda previa al pleno, por lo que todo apunta a que el documento económico superará el trámite plenario el próximo miércoles. La izquierda, en bloque, ha votado en contra de las cuentas, tras los cambios exigidos por Vox.
Para sacar adelante el Presupuesto, el ejecutivo de Barcala se ha plegado ante las reclamaciones de la formación ultra. Los dos socios del gobierno local han aprobado 19 de las 21 enmiendas presentadas por Vox. Y es que sólo han rechazado la propuesta de supresión de las subvenciones a los grupos municipales políticos (45.000 euros, que se reparten proporcionalmente al número de concejales, con casi 14.000 euros para el PP y 7.800 euros para Ciudadanos) y a una petición menor: la creación de la partida “tratamiento antideslizante aceras” con un simbólico euro para facilitar la disposición de fondos mediante una posterior modificación de crédito para realizar un tratamiento antideslizante en las aceras de determinadas vías que tanto con la lluvia como con el baldeo se convierten en peligrosas para los viandantes por el riesgo de resbalones. Esas dos han sido las únicas propuestas de Vox que han contado con el "no" del gobierno. Por parte de Ciudadanos, ha votado en la Comisión de Hacienda la concejala de Igualdad y Cooperación, María Conejero, ha tenido que ceder en drásticos recortes en sus áreas sociales.
En cambio, el bipartito ha aceptado el resto de propuestas de Vox, donde se incluyen las exigencias "ideológicas", como recortes o supresión de partidas de áreas sociales como Inmigración, Cooperación o Igualdad (LGTBI), todas en manos de Ciudadanos, además de reducir el presupuesto de "actividades de promoción cultural y celebración del 9 d´Octubre" en favor de la "Celebración del 4 de diciembre como Día de la Reconquista de Alicante", entre otras exigencias, entre las que se incluyen también habilitar nuevas partidas para proyectos como finalizar la reurbanización del paseo de Niza, impulsar tratamiento antideslizante en aceras, promover un parque en Gran Vía Sur y un centro social en el PAU 1.
El resto de enmiendas que han llegado "vivas" a la comisión previa al pleno, del PSOE, Unidas Podemos y Compromís, han sido rechazadas en bloque por el voto de PP, Ciudadanos y Vox.
Petición a petición
Así, entre las enmiendas más polémicas de Vox, que han contado con el visto bueno de PP y Ciudadanos, por lo que pasarán a formar parte del Presupuesto municipal, destacan la supresión del convenio con la Coordinadora de ONG (10.000 euros) y recortes (de 80.000 a 60.000 euros) en programas del Plan de Acogida y Cohesión Social para crear la partida Proyecto Plan de Voluntariado con 30.000 euros.
También, dentro de la campaña de Vox contra las áreas de Cooperación e Inmigración, el bipartito ha aceptado recortes en las subvenciones para proyectos de desarrollo (pasando de 160.000 a 135.000 euros), en estudios y trabajos técnicos inmigración (de 40.000 a 25.000 euros) y en subvenciones a entidades de interés social (de 110.000 a 90.000 euros) para, en cambio, fomentar ayudas en territorio nacional ante catástrofes (de 1 a 60.001 euros). Hace apenas unos días, el Consejo de Cooperación recordó al bipartito de Luis Barcala y Mari Carmen Sánchez el incumplimiento del compromiso preelectoral de que el 0,2% del presupuesto municipal se destinase a a Cooperación en 2020 y el 0,4% en 2023, elevando la cantidad al 0,7% para 2030. Antes de los recortes exigidos por Vox, apenas el 0,08% del presupuesto municipal iba a Cooperación, una cifra muy alejada del acuerdo de los partidos antes de elecciones, incluido PP y Ciudadanos.
Por otro lado, en Igualdad, otra área gestionada por Ciudadanos, también habrá recortes a petición de Vox. En concreto, el Plan Municipal de Igualdad pasará de 35.000 a 25.000 euros y la partida de apoyo al movimiento LGTBI se quedará en la mitad (de 50.000 a 25.000 euros) para impulsar una campaña "contra la violencia intrafamiliar", que es la catalogación que los ultras dan a la violencia machista, al negar el sesgo de género.
Además, el bipartito de PP y Cs ha validado la exigencia de Vox de recortar la partida de actividades de promoción cultural y celebración 9 d´Octubre (pasando de 204.000 a 174.000 euros) para fomentar la celebración 4 de diciembre por el "Día de la Reconquista de Alicante".
Por otra parte, también se rebaja de 6.000 a 2.000 euros la cuantía destinada a “reuniones y conferencias Estrategia 2030” por considerar que dispone, de inicio, con una cuantía que "supera por mucho lo necesario, ya que se la Agenda 2030 y su estrategia de aplicación municipal únicamente es un instrumento político carente de eficacia jurídica". La Agenda 2030 es una de las banderas que, supuestamente, más defiende el concejal de Presidencia, Antonio Peral.
Defensa del bipartito (y de Vox)
El alcalde, Luis Barcala, que ha presidido la comisión, ha expresado su "gran satisfacción" por la aprobación en la comisión de unos presupuestos que son "especialmente importantes para la reactivación en una coyuntura como la actual". Barcala ha remarcado que se trata de “unos presupuestos elaborados para la recuperación económica y la protección social de los alicantinos, convirtiéndose en los más expansivos de la historia de la ciudad manteniendo nuestro compromiso permanente de bajada de impuestos”, mientras que la concejala de Hacienda, la popular Lidia López, ha resaltado "la nula voluntad demostrado por los grupos de la izquierda municipal, que nunca han tenido interés real en aprobar estos presupuestos para la recuperación, a pesar de que se han incluido bastantes de las propuestas que efectuaron en la fase de negociación".
Gran satisfacción por la aprobación en la comisión de unos presupuestos que son especialmente importantes para la reactivación en una coyuntura como la actual
Por su parte, desde Ciudadanos, la vicealcaldesa Mari Carmen Sánchez ha destacado que su grupo está "francamente satisfechos de que se hayan aprobado estos presupuestos en Comisión de Hacienda". "Son unos presupuestos que cierran el ciclo en torno al covid y que van a permitir que la ciudad de Alicante se recupere tras estos años tan duros, sobre todo poniendo en marcha el proyecto de ciudad que teníamos como equipo de gobierno, sosteniendo esa vertebración social que es tan importante hoy en día y velando por el desarrollo de la economía", ha añadido, sin referirse en el comunicado del gobierno municipal a los recortes a las áreas que gestionan los naranja, las principales damnificadas de las enmiendas de Vox.
Desde Vox, por su parte, Mario Ortolá ha asegurado que su grupo no va a "torpedear un presupuesto que incorpora 19 de las enmiendas para ayudar a jóvenes, mayores y a defender a la familia de los ataques de una izquierda que ha votado en contra porque lo ha decidido alguien en un despacho en Valencia". "Tienen como prioridad mantener el sillón, muy por delante de defender los intereses de los alicantinos. Vox ha llegado para ser útil y para eliminar gasto ideológico. Lo estamos haciendo con dos concejales y seguiremos haciéndolo desde el gobierno en 2023", ha añadido Ortolá.
Indignación desde la izquierda
El secretario local del PSOE y concejal, Miguel Millana, ha explicado que su grupo ha votado en contra porque creen que "para que una administración funcione bien tiene que estar dotada al completo de la plantilla de funcionarios". "Nos ha preocupado muchísimo la indiferencia ante la atención a las personas especialmente en situación de emergencia alimentaria. El endeudamiento justificado está totalmente injustificado políticamente. No dialoga. ¿Señor alcalde, que hará con los remanentes si se restablecen las reglas fiscales que limitan el gasto? ¿Los entregará? Un disparate y un mandato absolutamente decepcionante y perdido del alcalde".
Por su parte, el portavoz socialista, Francesc Sanguino, ha indicado que Barcala ha aprobado 19 de las 21 enmiendas presentadas por VOX, "lo que constata la deriva de Barcala, que se echa en los brazos de la ultraderecha para sacar adelante las cuentas municipales". “Ha aceptado que se produzcan reducciones en las ayudas en servicios sociales, cooperación igualdad, inmigración… con tal de contentar a los discípulos de Abascal”, ha añadido Sanguino, quien ha apuntado que "Barcala no sabe unir, busca una visión parcial muy partidista, excesivamente partidista para un alcalde con visión de futuro para hacer avanzar a la ciudad en sus muchos retos y subsanar deficiencias".
Hoy se da por finiquitado el bipartito PP y Ciudadanos. Barcala ha cambiado de socio y ahora es Vox
El portavoz municipal de Unidas Podemos, Xavier López, da por "finiquitado el bipartito PP y Ciudadanos". "El PP ha cambiado de socio y ahora es Vox. Ciudadanos está oficialmente liquidado en esta ciudad con el desmantelamiento de sus concejalías. La señora Sánchez ya no pinta nada, si es que alguna vez lo ha hecho", ha señalado López, quien ha añadido que "Barcala ha sido incapaz de abrirse a pactos amplios y transversales". "Lo ha fiado todo a la ultraderecha y eso nos lleva a unas cuentas, que son las de mayor cuantía de la historia, con los mayores recortes sociales de todos los tiempos. Este Presupuesto afianza la desigualdad social y la injusticia fiscal, con las rebajas de impuestos a los más ricos", ha finalizado.
Por su parte, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha lamentado que el gobierno municipal "plantee multas para luchar contra la exclusión social", que "asuman recortes en derechos humanos de la ultraderecha" y que, en cambio, "no impulsen la transformación verde de la ciudad" ni promuevan "el diálogo y la negociación con la oposición".
