Los recortes en el recorrido de tres líneas del autobús urbano por el barrio de Juan XXIII tras los problemas de inseguridad continúan pese a la reunión de la Junta Local de Seguridad, que se reunió este miércoles, dos semanas después de modificarse el trayecto de las líneas 06, 11 y 17 por la veintena de pedradas recibidas por los autobuses en los últimos dos meses.
El órgano de seguridad se reunió a primera hora de la mañana en el Ayuntamiento de Alicante. A la cita en la antigua sala de la Junta de Gobierno, entre otros, acudieron el alcalde de Alicante, Luis Barcala; la subdelegada del Gobierno, Araceli Poblador, y representantes de la Policía Local, Nacional y Autonómica, además del concejal de Transportes, Manuel Villar. Estuvo ausente, por un problema de salud el concejal de Seguridad, José Ramón González.
Villar, tras la reunión, ha explicado que el encuentro tenía como "razones fundamentales: poner en conocimiento, aunar esfuerzos y transmitir seguridad a trabajadores y vecinos afectados". "Aunque no podamos decir las medidas policiales que se van a adoptar, sí podemos asegurar la predisposición tanto de la Policía Local, que era evidente, como de la Nacional, es total y en ese sentido creo que hemos dado un paso adelante para resolver este problema que, a mí, particularmente, me preocupa mucho”, ha señalado Villar. La Policía Local propuso patrullar sin distintivos para poder garantizar la seguridad tanto de los vecinos, los usuarios del transporte urbano, como de los conductores.
El edil Villar añadió, por otro lado, que “para la recuperación de las líneas en sus recorridos habituales se debe cambiar la percepción subjetiva de los trabajadores y conseguir convencer a los conductores de que con lo que se va a hacer van a poder trabajar seguros". "Tienen que ser conscientes de que con la labor que se va a hacer esta secuencia de actuaciones que se van a desarrollar les van a permitir trabajar con seguridad y recuperar la confianza en el trabajo”, apuntó el edil, quien aseguró que a lo largo del día se reuniría con representantes vecinales y del comité de empresa. Desde los representantes de los trabajados aseguraron que durante este miércoles no se ha producido ninguna reunión, por lo que todo sigue igual. Con todo, aseguraron que están decididos a reestablecer el servicio en cuanto el Ayuntamiento comunice las nuevas condiciones de seguridad.
Los vecinos de la Zona Norte, por su parte, anunciaron este miércoles, durante la celebración de la Junta de Distrito número 2, movilizaciones inminentes si las líneas de autobús no recuperan su recorrido habitual durante esta semana. En la reunión, a la que solo acudió el concejal Antonio Peral por parte del gobierno municipal, en su condición de presidente de la junta, se criticó al alcalde, Luis Barcala, al que acusaron de vivir ajeno a los problemas de la Zona Norte.
El concejal de Transportes recordó, tras la Junta Local de Seguridad, que la decisión de recortar el recorrido de las líneas 6, 11 y 17 de la Zona Norte “la adoptó el comité de empresa de la empresa concesionaria del transporte urbano en autobús (Masatusa) y se trasladó a la inspección de trabajo”.
La subdelegada, por su parte, aseguró la "máxima colaboración" de la Policía Nacional para intentar dar una solución a un problema que ha dejado sin línea de autobús a vecinos de la Zona Norte tras suprimirse paradas en la calle Barítono Paco Latorre. "Vamos a trabajar en una línea preventiva para corregir estos hechos y también en una línea de investigación para conocer a los autores", señaló Poblador.
