El Ayuntamiento de Crevillent ha denunciado ante el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) y de la Generalitat Valenciana la colocación de varias vías ferratas (peldaños de hierro en rocas) en la Sierra de Crevillent, un espacio calificado como Lugar de Interés Comunitario y como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).

La concejal de Medio Ambiente, Gema Gálvez, calificó estos hechos como "un atentado muy grave contra el medio ambiente". Por ello, indicó, "la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente estudia lo sucedido, por si se derivaran responsabilidades penales".

En concreto, el Consistorio tiene constancia de la aparición de vías ferratas en la zona conocida como la "Raia del Bubo", así como en el "Barranc Fort" y en el "Pas del Soldat". En este sentido, la edil de Medio Ambiente explicó que una vía ferrata es "un itinerario tanto vertical como horizontal instalado en la roca y compuesto, en el caso de Crevillent, por peldaños de hierro".

Respecto a la "Raia del Bubo", los autores han instalado unos 50 peldaños de hierro y han esculpido huecos en la propia roca para formar una especie de escalera. Esta actuación ha comportado, según explicaron desde el Ayuntamiento, "el deterioro y la destrucción de toda la flora del entorno, en especial, del algarrobo característico de esta zona, área que cuenta con la calificación de ZEPA, al considerarse un lugar muy importante para la cría de rapaces, como el águila perdicera".

El Ayuntamiento ha sido conocedor de este tema a través de varios colectivos locales, y no descarta su colaboración para retirar los peldaños.