Santa Pola vuelve a ver caras familiares de turistas nacionales en esta temporada estival. Y es que se ha registrado un retorno de los visitantes más fieles a Santa Pola, que dejaron de llegar a la villa marinera por motivos de crisis económica. El reflejo de este incremento se deja notar especialmente en el alquiler de pisos y casas en la costa para pasar el verano.

Las inmobiliarias coinciden en el regreso de caras familiares, pero también en las cifras de visitantes en las oficinas de turismo que se han incrementado en un 60% en el punto de Información Turística del centro con respecto al año 2016.

La demanda este año en cuanto a los alquileres vacacionales, por parte de visitantes españoles es mayor que el año anterior, apuntan varios gerentes de inmobiliarias en la villa marinera. Los motivos son varios. Al parecer, hay cierta recuperación económica de antiguos clientes que eran habituales pero que, por circunstancias laborales adversas dejaron de alquilar la residencia de verano durante algunos años.

Según los arrendadores, en 2017 han vuelto muchos clientes a estos establecimientos para retomar la costumbre de veranear, al menos algunas semanas, en un piso alquilado en Santa Pola.

Otro de los motivos del aumento de clientes, según observan quienes regentan estas inmobiliarias, es que el precio máximo de alquiler en la villa marinera ha bajado este año. Mientras que el tope en 2016 se situaba en los 3.000 euros, este año se reduce a los 2.400 euros.

Este refuerzo de turismo nacional se deja ver también los números que arrojan los puntos de información turística en verano.

El punto de la Oficina de Turismo en el centro ha duplicado las visitas recibidas de visitantes nacionales. En concreto han sido 833 visitas frente a 344 en 2016. En datos globales, hay un 63% más de visitas de nacionales y un 11,78% de extranjeros. Las visitas totales aumentan un 40% con respecto a 2016. Esto se traduce en que se ha pasado de tener un total de 1.868 a 2.610 personas que han pasado para requerir información. De ellos, 1.661 han sido nacionales y residentes en España y 949 extranjeros.