Enseres, podas y acabar con los excrementos en la vía pública son tres problemas para Santa Pola que requieren de una solución conjunto que implica a varias concejalías. Por este motivo, el Ayuntamiento de Santa Pola anunció ayer que está coordinando en las últimas semanas distintas reuniones entre las áreas de Seguridad y Limpieza con la empresa concesionaria de la limpieza, Urbaser, y la Policía Local de Santa Pola «con el objetivo de reforzar la limpieza en distintos puntos de la ciudad», explicó en un comunicado.
En la reunión se identificaron por parte de la Jefatura Local de Policía y de la empresa Urbaser las zonas del término municipal que mayor registro tienen de abandono de enseres, podas, excrementos de mascotas y orines. «Desde el Ayuntamiento se pretende acabar con estas prácticas que son especialmente reiteradas en puntos en concreto de la ciudad, que registran abandonos de enseres y de poda, sin el aviso a los servicios de recogida o el traslado al punto limpio. El servicio de recogida gratuita de enseres a domicilio, proporcionado por Urbaser, la empresa responsable del servicio de limpieza, continúa estando disponible para la ciudadanía previo aviso al teléfono 966 693 955 y mediante whatsapp en el 686 801 323».
Orines
«En cuanto a los excrementos y orines en las calles, también se han identificado puntos problemáticos en Santa Pola, aunque se trata de un problema generalizado por lo que se va intensificar el control y se pide a la ciudadanía que respete la ordenanza de convivencia ciudadana», explican desde el Ayuntamiento.
La normativa exige la tenencia en la calle, durante el paseo, de bolsas y recambios para la recogida de excrementos y líquido higienizante para diluir los orines en la vía pública. Las sanciones recogidas por los incumplimientos podrían alcanzar hasta los 750 euros. El Ayuntamiento pretende que las iniciativas que se pongan en marcha, en colaboración con la Policía Local, permitan mejorar la imagen de la ciudad, especialmente durante los meses de verano donde más aumenta la población y también, por desgracia, los incumplimientos.
