El contrato por 10 años de las basuras de Torrevieja lo fue por 143 millones de Euros, nada menos que 23.793 millones de las antiguas pesetas, como así consta en el expediente en la valoración realizada por el economista municipal, y no por 97,8 millones de euros como se viene publicando en la mayoría de medios de comunicación.

El error es comprensible pues se deduce del texto de las sentencias del TSJCV y del Tribunal Supremo, en las que se recoge la cantidad de 97,8 millones, resultante de multiplicar por 10 el importe de la cantidad que debía de pagarse en el primer año del contrato, 9.780.000 ?. En esa cuantificación no se advirtió que el contrato se actualizaba anualmente con dos parámetros que lo hacían crecer exponencialmente, el incremento anual del IPC y el crecimiento urbanístico de la ciudad, incorporando las numerosas nuevas viviendas que año tras año se construyen en Torrevieja.

Así, podemos ahora comprobar que de los 9.780.000 ? que se fijaron en el contrato para su primer año de vigencia, se ha pasado a los más de 15.100.000 ? que representa su coste en el año 2013, lo que corrobora la abultada cantidad de los 143 millones de euros fijada por el técnico municipal, que en pesetas superaría los 23.793 millones, nada menos que veintitrés mil trescientos millones de las antiguas pesetas.

Todo el amaño, mentiras y falsedades a los que se dedicó en cuerpo y alma el exalcalde de Torrevieja, condenado ahora a tres años de privación de libertad, lo fueron para conseguir que a una determinada empresa se le adjudicara este jugoso y millonario contrato, lesionando el derecho a la igualdad de oportunidades y el interés legítimo del resto de las mercantiles que participaron en este concurso público, y sobre todo al conjunto de los ciudadanos de Torrevieja que siempre son los más perjudicados por este tipo de escándalos de corrupción.

Además merece también la pena recordar, que a la empresa a la que se benefició con este impresionante pelotazo, se le han adjudicado otros contratos millonarios para la ejecución de dotaciones e infraestructuras municipales, cuyo coste en alguno de los casos, se ha disparado incrementándose hasta en más del 90% del importe de su adjudicación, cuestión esta que analizada con el antecedente de la Sentencia del Supremo, genera serias dudas sobre la limpieza e imparcialidad con la que las mismas se tramitaron en su día.

Queda pues meridianamente claro, que la condena a tres años de cárcel y a nueve de inhabilitación del exelcalde Hernández Mateo por falsificación documental y prevaricación continuada, lo ha sido por amañar un contrato menor de consultoría externa de dos millones de pesetas (12.000 euros), con el que fue posible adjudicar el contrato archimillonario de las basuras, cuyo coste total durante sus diez años de vigencia le va a costar a los contribuyentes de Torrevieja 23.793 millones de pesetas (143 millones de Euros), todo ello sin contar con las numerosas deficiencias detectadas en el servicio, el incumplimiento de muchas de las cláusulas del contrato y otras tantas irregularidades que como de costumbre sólo han beneficiado a la empresa adjudicataria y muy posiblemente al político corrupto que facilitó el pelotazo, de nada menos que de 23.793 millones de pesetas.

Los que vienen vendiendo que Hernández Mateo ha sido condenado por un tema menor, por un contrato de 12.000 euros, sólo tratan de quitarle gravedad al asunto y no se lo creen ni ellos, ya que ¿quién va a ser el listo que se va a pringar por la pecata minuta de 12.000 euros? Está claro que nadie, y eso lo sabe todo el mundo en Torrevieja y fuera de ella.