Dos policías nacionales fuera de servicio atendieron ayer a un hombre de 67 años que había sufrido un infarto mientras conducía por la autopista AP-7. El afectado, de 67 años, se hallaba tendido en el arcén cerca de su vehículo y viajaba acompañado de su mujer, de 64 años, quien, según la nota enviada por la Policía, se encontraba en el interior del coche en estado de shock. El afectado fue ingresado en la unidad de hemodinámicos del Hospital de Sant Joan, según informó ayer el Sindicato Unificado de Policía (SUP) en un comunicado.

El incidente ocurrió pasadas las 9 de la mañana de ayer en el punto kilométrico 659 de la autopista AP-7, cuando los dos agentes se dirigían a la Audiencia Provincial de Alicante para testificar en un juicio. El informe de la actuación pone de manifiesto que «cuando se dirigían a Alicante» encontraron «que en el arcén de la autopista había un vehículo y junto a él un hombre tirado en el suelo que no se movía». Tras comprobar que el afectado mantenía signos vitales, señalizan el vehículo para evitar accidentes en la vía y alertan a los servicios de emergencias «tanto por llamada telefónica al 112 como por el poste de SOS». El comunicado recoge la «tardanza» de los medios de ayuda solicitados hasta la aparición de una ambulancia del SAMU procedente de Villajoyosa.

El relato de los agentes recoge que «debido a las circunstancias de la vía no pueden detener el vehículo», por lo que «deben circular marcha atrás varios metros». Cuando llegan al todoterreno «se percatan de que en el interior del coche hay una mujer» que «manifiesta que «no ha podido hacer nada porque se encuentra en estado de shock», cuenta el comunicado.