MacMaste tiene barba, como uno. Macmaste se ha convertido en mi último Otro favorito. Desde la aparición de un escrito simulando el lenguaje de Shakespeare en Gran Bretaña, (de un estudiante de cuarto), nadie había vuelto a ser tan osado, a pesar de existir muchos Otros en diversos temas. Tom Mac es realmente "A gay girl in Damascus", o lo que es igual Amina Abdalá Araf al Omari, el otro travestido de sí mismo, blogger lesbiana siria que había desaparecido la semana pasada después de ser detenida por la policía del régimen de Bachar Al Asad. Americano, casado, y con ganas de escribir muchísimas cosas. La frecuencia del Otro, el ser que se apodera del Uno cuando escribimos, es aleatoria, el engaño ante los demás depende siempre de tu poder de convicción. Alonso de Quijano estaba seguro de su montura, un jamelgo escuálido y piojoso, de sus gigantes, molinos harineros, de su amada, nadie más allá del velo de sus ojos. Porque en este arte, el de los escribidores, existe el embozo, la estrategia sutil de la mentira que alimenta el aliento hasta el desenlace final. ¿Qué más dá que la foto de activista Amina fuera una foto hurtada a cualquiera?. La recreación de Amina, siria, luchadora, lesbiana, activista pro derechos humanos, conmovió a sus lectores en todo el mundo. Amina es el Otro de MacMaste. Mi Otro, por ejemplo, es èste que defiende al autor, aunque yo no sea nadie, ni siquiera un bloguer anónimo que lanza sus letras contra sí mismo.