El Meridiano tiene razones para regresar de Fuenlabrada con un alto grado de satisfacción pese a la derrota en un partido que se convirtió en una auténtica montaña rusa. Los alicantinos remontaron 17 puntos de desventaja hasta ponerse con 8 puntos de ventaja a falta de 6 minutos (57-65). El equipo de Vidorreta dispuso de la última posesión para anotarse un triunfo envuelto en la épica, pero Doellman falló el decisivo lanzamiento después de anotar 27 puntos con una espectacular serie de 6 de 7 en triples. Restaban cuatro segundos y la posesión era para el Meridiano. Stojic saca de banda con instrucciones claras: balón a Doellman. Cara o cruz. El americano falló y el Fuenlabrada celebró una victoria que vio deslizarse por momentos.

Espectacular tramo final entre dos conjuntos que merecieron el triunfo. La primera parte fue claramente para el Fuenlabrada ante un Meridiano que salió adormilado al Fernando Martín. Tras el descanso, todo cambió con un espectacular parcial de 9-31 para los alicantinos con un estelar Doellman que lanzaba a su equipo hacia la victoria. Ayón y Valters, que anotó los tiros libres decisivos, formaron la barrera que impidió la sonrisa del Meridiano.

Inicio pésimo

El Fuenlabrada rompió al conjunto lucentino en un segundo cuarto en el que el conjunto lucentino quedó borrado de la pista. Sólo los puntos de Doellman evitaron una diferencia de escándalo al descanso. Los madrileños firmaron una primera parte impecable, en especial el segundo parcial en el que anotaron seis triples, tres de ellos de Mainoldi. El equipo de Vidorreta fue a remolque desde el inicio del encuentro con una imagen muy distante a la de los dos pultimos encuentros en casa. Ayón se convertía en una pesadilla para los lucentinos mientras el Meridiano sólo daba fe de su existencia en Fuenlabrada por la aportación de Doellman.

El ataque se convirtió en un lastre para los alicantinos (9 de 24 en tiros de 2 al descanso) y en defensa había demasiadas lagunas que aprovechaban bien Laviña y Valters. Al descanso, 19-14. Poca consistencia y concentración en un pabellón totalmente volcado con su equipo.

Pudo ser peor

El segundo cuarto no pudo comenzar peor para los lucentinos. Un triple de Colom tras un espectacular tapón de Biyombo sobre Andriuskevicius hizo que el Fuenlabrada elevará a la enésima potencia su confianza. En ello contribuyó también el anárquico e irresponsable juego de Heurtel (1 de 7 en lanzamientos al descanso). Un triple de Urtasun hace recobrar el pulso a los alicantinos, pero no tardó en llegar el rotundo parcial de 13-0 (38-21) con Mainoldi de auténtico héroe con tres increíbles triples. Doellman replica en solitario con tres triples que dejan un marcador al descanso complicado pero con un pequeño hueco para la esperanza (43-31) gracias a los puntos del americano.

Cambio de imagen

El Fuenlabrada siguió haciendo daño en la herida con un triple de Guardia segundos después de que Stojic fallara debajo del aro dos acciones consecutivas. Era el 48-34. A partir de ese momento, el decorado fue otro. El verdadero Meridiano saca sus armas a relucir. Comienza el espectáculo. Parcial de 0-8 para empezar (Fuenlabrada 0, Doellman 8). Triple de Llompart desde ocho metros más los puntos de Urtasun y Rancik para volver a mandar en el marcador después de mucho tiempo (52-53) y parcial de 4-19. Colom rompe el romanticismo del Meridiano con la canasta con un triple pero instantes después Urtasun deja todo como estaba con tres puntos más.

Así, con 55-56 se llega al definitivo acto. Primer objetivo conseguido, el equipo estaba totalmente dentro del partido.

La muñeca de Doellman seguía tan caliente como todo el pabellón. Su sexto triple coloca una ventaja para el Meridiano de 8 puntos (57-65) a falta de 6 minutos. Pese a los continuos golpes, el Fuenlabrada no caía al suelo. Rabaseda permite a los suyos aferrarse al partido y de nuevo Maionoldi y Ayón sacan a relucir su calidad. Enseguida se une Valters con un triple que congela al Meridiano a falta de un minuto (72-71). La tensión se palpaba en el ambiente. Rancik permite un breve respiro. Ayón falla dos tiros libres que podían haber sentenciado el choque para el Meridiano pero el rebote se lo queda el Fuenlabrada. Valters no falla desde la línea de tiro libre y los últimos siete segundos eran para los alicantinos. Doellman pudo variar el signo, pero su muñeca se enfrío en el peor momento. En cualquier caso, sobresaliente el equipo.