Salvador Brotons, de 65 años, fue la primera persona de la provincia en recibir la vacuna frente al covid. Aquel 27 de diciembre, con la tercera ola a la vuelta de la esquina, se empezó a escribir la historia del final de una pandemia que ha causado en la provincia de Alicante 2.823 muertes en 15 meses.
Y es que las vacunas han permitido darle la vuelta a esta crisis sanitaria. Tanto que las muertes por coronavirus han caído un 99% en la provincia de Alicante desde que aquellas primeras vacunas comenzaron a hacer su efecto. La última semana de enero, la provincia de Alicante llegó a registrar en una semana 336 fallecimientos a causa del virus. En la semana del 3 al 9 de mayo, la última de la que hay datos consolidados disponibles, Sanidad notificó tres muertes en la provincia.
Aunque de momento sólo un 14% de la población tiene la pauta completa de vacunación, y los pinchazos aún no han llegado a los segmentos de edades medias, su impacto ya se deja ver en la curva de decesos, ya que es a la población de más edad, y por tanto la más vulnerable a enfermar gravemente si contrae el virus, a la que primero se ha protegido.
Los geriátricos, los más castigados en esta pandemia, fueron los primeros en notar el alivio de tener a todos sus trabajadores y ancianos protegidos. Hasta que se comenzó a inmunizar a esta población tan vulnerable, las residencias concentraban un tercio de las muertes por coronavirus, a finales de abril, este porcentaje había bajado al 6,7%.
Junto a estos centros también se ha vacunado ya a todos los mayores de 80 años en la Comunidad Valenciana con la pauta completa. El grupo de 70 a 79 años avanza también a buen ritmo y un 93% tiene ya puesta al menos una dosis de la vacuna y el 60% la pauta completa.
Al margen de que a finales de verano se alcance la anhelada inmunidad de rebaño, los expertos creen que cuando se acabe de proteger a todos los mayores de 60 años se podrá hablar de un antes y un después en esta pandemia, puesto que aunque haya contagios no se saturarán ni los hospitales ni las UCI de la forma en la que lo hicieron el pasado invierno. Para llegar a esta meta no queda mucho. Prácticamente el 90% de los mayores de 60 años ya tienen al menos una dosis de la vacuna, por lo que están protegidos en un 80% a la hora de contraer la enfermedad de manera grave.
A la mejora de la situación de los hospitales ha contribuido también la vacunación del personal sanitario. En los peores momentos de la pandemia, la provincia llegó a tener hasta un millar de profesionales fuera de juego de manera simultánea, bien infectados por el virus o en cuarentena por haber estado en contacto con un positivo. A día de hoy, los casos de covid ente las plantillas de sanitarios son pura anécdota.
La Comunidad recibe más de 200.000 vacunas semanales frente al coronavirus de cuatro laboratorios diferentes, aunque a partir del mes que viene serán solo tres, con la no renovación del contrato a AstraZeneca por parte de la Unión Europea. La Generalitat Valenciana tiene la esperanza de que junio sea el mes en el que la inmunización masiva despegue por fin. Para ello, Pfizer se ha comprometido a mandar el doble de vacunas y también Janssen tiene previsto aportar remesas suficientes para acelerar la inmunización.
Llega el turno para los menores de 60 años
La próxima semana arrancará con un nuevo grupo de población a vacunar. Será el turno para los menores de 60 años, en concreto para la franja de ente 50 y 59 años, 278.277 personas en la provincia de Alicante. La Generalitat confía en tener vacunado a este grupo en el mes de junio. Y a mediados del mes que viene, si la llegada de dosis lo permite, se empezaría a inmunizar a las personas entre 40 y 49 años, el grupo más numeroso de los vacunados hasta el momento y que en la provincia de Alicante suponen 309.052 personas.
