La mitad de las personas a las que les detectan una infección de covid no saben dónde se han contagiado o, por lo menos, así se lo transmiten a la Conselleria de Sanidad. Es uno de los indicadores que ofrece el ministerio en su conocido semáforo y que alerta de que la Comunitat Valenciana ha perdido la trazabilidad, esa línea a partir de llamadas en Atención Primaria que dibuja los diferentes contactos y que permite anticipar futuras infecciones.

Según las cifras facilitadas en el informe semanal del departamento dirigido por Carolina Darias, la Comunidad Valenciana solo conoce el origen del 51 % de los más de 3.700 positivos que se notificaron entre el 24 y el 30 de junio. Este 51 % la sitúa en «color naranja», nivel de alerta 2 o medio, pero a apenas un punto de caer al nivel de riesgo alto o «color rojo».

De este color está «pintada» la provincia de València en la que solamente se conoce el origen de contagio del 47 % de sus casos, números hasta 20 puntos inferiores a los de Castelló (donde la trazabilidad se alza hasta el 67 %) y 15 a los de Alicante (61 %). En el ámbito autonómico, solo Andalucía, Aragón, Castilla y León y Euskadi tienen peor número en este indicador que la Comunidad Valenciana que ha visto cómo en dos semanas la capacidad de rastreo caía 12 puntos.

No es el único parámetro en el que el repunte de la última semana deja peores cifras. En el informe de hace tres semanas, cinco de los ocho parámetros que marca el semáforo del ministerio estaban en azul claro, que significa «nueva normalidad». Solo la incidencia acumulada en 14 y 7 días y la trazabilidad, cuando se conocía el origen de dos de cada tres nuevos contagios, tenían los colores amarillo y naranja, respectivamente.

Ahora, este color naranja, además de a la trazabilidad, también pinta los números de la positividad (porcentaje de pruebas que confirman un casos respecto al total, ahora del 7 %) y de la incidencia acumulada a 14 días (se alza hasta los 121 casos por 100.000 habitantes) mientras que la tasa de contagios en la última semana está en rojo con 79 positivos por 100.000 habitantes.

Por último, el repunte de contagios también ha afectado a los grupos de mayores de 65 años, en su mayoría vacunados, donde la incidencia acumulada se ha más que triplicado desde los 9 y 4 casos por 100.000 habitantes hasta los 22 y 14 de la última semana pintando este indicador de amarillo. Con ello, solo el porcentaje de camas de hospital y UCI ocupadas mantienen índices de «nueva normalidad».