Infante y sus obras emparejadas
El artista inaugura hoy en Parking Gallery El mar es más que el cielo-Paintings in love
Eduardo Infante trabaja siempre con dos obras a la vez, deambula entre el papel y el lienzo y combina de forma natural el dibujo y la pintura. Ahora, estas dicotomías emergen en la exposición que inaugura esta tarde, a las 20 horas, en Parking Gallery, que realizó con este artista alicantino nacido en Girona hace 40 años su primera exposición individual en 2011.
El mar es más que el cielo-Paintings in love es el título de esta primera serie de trabajos en los que Infante muestra en qué consiste su proceso creativo a través de las obras que se relacionan y se emparejan en su estudio.
«Siempre he trabajado con dos obras simultáneamente pero nunca las había expuesto así, sino de manera convencional, y decidí no luchar más contra esa contradicción», señala Infante, que reconoce que no le cuesta compaginar dos líneas de trabajo diferentes, «puedo empezar con algo delicado y seguir con algo brutal, vuelvo a una obra y a otra y se van radicalizado y equilibrando, van encontrando sus parejas, se relacionan y tienen su propio diálogo».
Dibujos y pinturas que a solas «se domesticaban, perdían algo, el elemento salvaje que las unía» y que, de forma conjunta, «suman, aunque sean mezclas explosivas, y a mí me gustan las radicalmente opuestas, que para que encajen entre sí necesitan una negociación».
Así, en la muestra se exhibe una decena de pares de obras de mediano y gran formato donde conviven perfiles de inspiración grecolatina con pequeños lienzos de abstracción geométrica o faunos figurativos con piezas austeras sobre cartón. Todo, acompañado de multitud de dibujos que muestran el proceso de trabajo con todas las combinaciones posibles.
«Parte de la gracia es aceptar algo con lo que no contabas, como en un single que te compras por la canción de la cara A, y que al final la de la cara B se convierte en tu favorita», explica Infante, cuya pintura no olvida lo clásico, el arte griego y romano, la mitología o el universo fantástico, ya que, confiesa, «no me interesa demasiado representar lo real, porque la realidad ya es pintar».
La exposición se puede disfrutar hasta el 28 de junio.
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