El establecimiento de la localidad mallorquina de Magaluf en el que se practicó una felación colectiva ha sido sancionado con un año de cierre y 55.000 euros de multa, según informó ayer el Ayuntamiento de Calvià.

El Consistorio exponía a través de una nota informativa que hizo pública ayer que el jueves 24 de julio notificó la sanción impuesta al propietario del local Playhouse, ubicado en la calle Martín Ros García de Magaluf, y a los responsables de la empresa Carnage Magalluf.

El Ayuntamiento ha apuntado que la sanción llega después de «haberse determinado, tras una pormenorizada investigación de la Policía Local de Calvià, que fue dentro de este local donde se practicó una felación colectiva grabada en un vídeo al que se dio difusión a principios de este mes de julio a través de las redes sociales».

A la empresa Carnage Magalluf «se le considera también responsable, al ser la organizadora y promotora de la actividad desarrollada durante la excursión Pub Crawling en la que se cometió la ilegalidad», apunta el consistorio en su comunicado.

Rechazo de este tipo de turismo

Las reacciones no se hicieron esperar. En opinión de la portavoz del ejecutivo balear, Núria Riera, esta acción es una muestra más de las diversas actuaciones que se están llevando a cabo desde las distintas administraciones para solventar este tipo de turismo, que provocó el rechazo generalizado de las diversas instituciones y ciudadanía en general.

Según ha reiterado Riera en el transcurso de la rueda de prensa que se celebra posteriormente al Consejo de Gobierno balear, se está trabajando desde los ámbitos, autonómico, insular y local para poner orden a este tipo de actividades de ocio y fomentar un turismo de calidad, que es por el que apuesta el archipiélago.

En este sentido, la portavoz ha señalado que se han realizado 232 inspecciones de turismo, 105 en materia de salud y 15 de trabajo en la localidad de Magaluf en lo que va de verano.