Alfombra «oscura» con blanco ilicitano

También acudieron Dulceida, Eugenia Martínez de Irujo y C. Tangana

XXXVII edición de los Premios Goya

XXXVII edición de los Premios Goya / Jorge Zapata

Carla Melchor

Carla Melchor

El color negro, las capas y la presencia valenciana marcaron ayer la alfombra de los Premios Goya. Elena López Riera y Luna Pamies protagonizaron los primeros momentos del acto con estilismos de Courrèges y Maison Alaia, respectivamente. Otro valenciano que se paseó por la alfombra sevillana fue el cantante Guitarricadelafuente, nacido en Benicàssim. Por sorpresa acudió la ilicitana Blanca Paloma, ganadora del Benidorm Fest, que representará a España en Eurovisión con su tema «Eaea». Asistió a la gala en compañía de la directora de Comunicación de RTVE, María Eizaguirre.

Sobre la alfombra de los Goya primó el color negro. De hecho, Penélopez Cruz, Clara Lago, Elena López Riera, Belén Cuesta, Natalia Lafourcade, Maribel Verdú, Lucía Jiménez, Carolina Yuste, Cayetana Guillén Cuervo, María León, Andrea Duro, Isabel Coixet, Alauda Ruiz de Azúa y Ana Castillo eligieron este color para asistir a la fiesta del cine español. La modelo Nieves Álvarez, una de las más estilosas en cada edición de estos premios, eligió el marrón.

Aunque también imperó el blanco y el beige, como el de Belén Rueda, Carla Simón, María Zamora, Nerea Barros, Raquel Sánchez Silva, Cristina Castaño o India Martínez.

En general, en los estilismos destacaron los de siempre, como Eduardo Casanova, con un atrevido escote, o la actriz Macarena García que eligió un rosa fucsia favorecedor que captó las miradas de todo el público. La actriz Juana Acosta apostó por un vestido palabra de honor, de gasa, de Giambattista Valli, en el que predomina una rosa XXL en el escote.

La influencer Dulceida también fue el centro de todas las miradas con un estilismo de lo más llamativo por su color rojo, ceñido, con lentejuelas y una capucha que terminaba en una capa.

Por otro lado, C. Tangana acudió con su novia, la fotógrafa chilena Rocío Aguirre. Eugenia Martínez de Irujo también acudió de la mano de su pareja, Narcís Rebollo, presidente de Universal Music en España y Portugal.

La más reivindicativa de la alfombrafue Isabel Coixet, que lució una chaqueta con el siguiente mensaje: «Women, Life, Freedom» («Mujer, vida, libertad»). La prenda tiene relación con la muerte de Mahsa Amini por no llevar el velo. La joven iraní de 22 años, se convirtió en símbolo feminista del país tras morir cuando se encontraba bajo custodia policial.