La Asociación de Periodistas de Alicante cumple 120 años

El premio Libertad de Expresión recayó en Manuel Mira Candel, y Blas de Peñas fue nombrado Asociado de Honor de la APPA

Rosalía Mayor

Rosalía Mayor

No sé si a los periodistas nos temen más que nos quieren, pero la cuestión es que hace unos días la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante reunió a más de seiscientas personas en la XIII Gala Off the record para celebrar su 120 aniversario, que ya tiene su mérito, después de sobrevivir a dos guerras mundiales, la Guerra Civil, la dictadura, la transición, la democracia, una pandemia mundial y a los políticos de uno y otro lado.

Para empezar con fuerza y energía, el «Fandango» de Boccherini, interpretado por la Orquesta de cámara Virtuós Mediterrani que dirige Gerardo Estrada y que quiso con su actuación colaborar con la APPA, dio inicio a este acto conducido por Diego Ferrándiz, Ana Ibáñez y Andrés Maestre.

En la celebración, muchos «plumillas» y una nutrida representación de la provincia y de la Comunidad Valenciana. ¡Qué alegría ver a tantos que se apuntaron a colaborar con su presencia a la vertebración entre las tres provincias! Cuando vienen, también lo decimos y agradecemos.

Después de recordar la reciente y tristísima noticia del fallecimiento de Manolo Alberola, se presentó el Anuario de la APPA, con una portada realizada por inteligencia artificial, sumándose la APPA a la realidad del cambio que se está produciendo en el periodismo. Como es tradicional, durante el evento se entregó el premio Libertad de Expresión que, en esta ocasión, recayó en el periodista y escritor ganador del Premio Azorín 2004, Manuel Mira Candel, por su larga y exitosa trayectoria profesional.

Actuó de anfitrión en representación del presidente de la Diputación Juan de Dios Navarro, diputado de Cultura, que estaba acompañado por el alcalde de Alicante, Luis Barcala; el conseller de Educación, José Antonio Rovira; el subdelegado del gobierno en Alicante, Juan Antonio Nieves, y los rectores de la UA, Amparo Navarro y de la UMH, Juan José Ruiz;

Nutrida representación de AEPA (Asociación de Empresarias, Profesionales y Directivas de la provincia de Alicante), entre las que se encontraban su presidenta, Marcela Fernández; la directora, Carolina Martínez y Sonia Brujas.

El estamento militar, con sus máximos representantes: Juan Bosco, subdelegado de Defensa; Francisco García-Almenta, general del MOE; Joaquín Vegara, comandante de Marina; José Hernández Mosquera, coronel de la Guardia Civil, o Manuel Lafuente, comisario provincial de la Policía Nacional.

Por supuesto, muchos compañeros de profesión. Los presidentes de la Asociación de Informadores de Elche, Mariate Bolívar (acompañada de parte de su junta entre los que se encontraban Salvador Campello, Gaspar Maciá, Juan Carlos Romero y Sandro Maciá) y de la Asociación Profesional de Periodistas Valencianos, Héctor González, (junto a Javi Matoses, Vanessa Caruana y Emi Barberá), cambiaban impresiones con asociados de la APPA como José María Perea, Blas de Peñas, Asunción Valdés, Mariano Soriano, Benjamín Llorens, María Rosa Mirasierras, o María José Pastor.

Diputados nacionales como Araceli Poblador, autonómicos como Lola Peña y Yaissel Sánchez; el alcalde de San Vicente, Rafael Pascual; Carlos Baño, presidente de la Cámara de Comercio; Mayte Antón, presidenta de AEFA; Andrea Postigo, Dama del Foc; el empresario Joaquín Selma; Luis Castillo, presidente de la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante; fueron otros de los asistentes.

Muy corporativos, y haciendo un guiño a la profesión, Vicente Cutanda y Ana Ramos, con sus zapatos forrados de papel de periódico. La escritora y periodista Evelyn Mesquida; el presidente del EON, Jaime Cremades y de su fundación, Asunción Sánchez Zaplana; Diego Menor, secretario general de Faes-CV; Luis Tovar, presidente del CSIF provincial; Ramón Alonso, responsable de Comunicación de Coca-Cola, o Montse Angulo, presidenta del colegio de Enfermería, otros de los asistentes, escucharon la reivindicación de la APPA sobre la necesidad de la libertad de expresión y de volver a los principios de la profesión: veracidad, rigor y ética. ¡Larga vida al periodismo y a los periodistas!