Superclásico europeo en Alicante

España-Inglaterra. Dos campeones del mundo y de Europa, dos aspirantes al trono continental el próximo verano y dos conceptos del fútbol se miden esta noche (20.45, Telecinco) en un amistoso de campanillas en el estadio Rico Pérez, que volverá a llenarse cuatro años después de la última visita de la Roja (ante Escocia el 11 de octubre de 2011). La enorme expectación suscitada en Alicante por este partido ha superado todas las previsiones y evidencia que esta provincia tiene hambre de fútbol de élite y alta competición, más allá de las penurias que atraviesan sus clubes profesionales. Al margen del resultado, la ciudad ya ha ganado este duelo, que dejará en las arcas de la ciudad más de 2,6 millones de euros, según un estudio de la Cámara de Comercio.

Cerca de 30.000 espectadores llenarán hoy el coliseo blanquiazul para presenciar un duelo cuyo último antecedente también se remonta a 2011 en Wembley (con triunfo inglés por 1-0 y gol de Lampard). Las últimas 800 entradas se vendieron ayer en apenas dos horas a través de la página web de la Federación Española.

Idéntica expectación se vivió en el último entrenamiento de la Roja celebrado ayer en el Rico Pérez entre las siete y las ocho de la tarde, justo después de la sesión de trabajo de los ingleses. Más de 10.000 personas, con una nutrida afluencia de niños, acudieron al estadio para presenciar un entrenamiento suave de puesta a punto que contó con tandas de carrera corta, rondas de porteros, lanzamientos a puerta y dos partidillos: uno sin porteros para ejercitar la posesión y otro con Casillas y De Gea bajo palos.

En el equipo que se presume titular, Del Bosque alineó a Casillas; el alicantino Mario Gaspar, Piqué, Bartra, Jordi Alba; Thiago, Busquets, Iniesta; Fàbregas; Diego Costa y Alcácer. En el otro equipo jugaron De Gea; De Marcos, San José, Nacho, Azpilicueta; Koke, Cazorla, Mata; Pedro, Morata y Nolito. El público se volcó con el exmadridista Casillas y hubo división de opiniones, pitos y aplausos, para el barcelonista Piqué.

El Rico Pérez mide esta noche el vuelo de dos selecciones en plena «transición generacional» -como lo define Del Bosque-, que afrontan su primer amistoso rumbo a la Eurocopa de Francia'2016 tras superar con comodidad sus respectivas fases de clasificación: el equipo de Hodgson ganó sus 10 partidos en el grupo E y España sumó nueve victorias y una sola derrota en el C.

Del Bosque y Hodgson, dos veteranos en el tramo final de sus carreras, que buscarán resarcirse en la Eurocopa de sus respectivos fracasos en el Mundial de Brasil. Para ello, cambiarán algunos nombres, pero no el estilo de sus equipos. España sigue apostando por el toque y el juego asociativo, mientras que Inglaterra -que también ha mejorado en la elaboración- se reafirma en su filosofía de fútbol directo, aunque con una nómina de jugadores jóvenes llamados a grandes empresas como Sterling y Kane. El líder natural del equipo, Wayne Rooney, no jugará porque su técnico lo reserva para el amistoso del martes ante Francia.

Pese a las múltiples ausencias en ambos conjuntos, el choque mantiene todo el aliciente de enfrentar a dos de los favoritos para la Eurocopa, junto a la anfitriona Francia, la campeona mundial Alemania y la siempre competitiva Italia. En España faltarán tres titulares habituales -Sergio Ramos, Silva y Juanfran, a los que se unen los madridistas Isco y Carvajal-, mientras que en los «pross», a la baja por decisión técnica de Rooney se suman las de Wilshere, Milner, Wellbeck, Sturridge, Shaw y Walcott.