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Marcelo Trobbiani: «Es un disparate llevar a Madrid el River-Boca; se tenía que jugar en Sudamérica»

Leyenda viva del franjiverdismo y de Boca, donde se forjó como futbolista y «salió» campeón en 1981 junto a Maradona, Trobbiani coordina a sus 63 años el fútbol base del Barcelona de Guayaquil, en Ecuador

El que fuera un fino mediocentro Marcelo Trobbiani (Santa Fe, Argentina, 1955) dejó Boca Juniors en 1976 para fichar por el Elche, donde jugó cinco temporadas en dos etapas (la segunda en 1986-87). Experto en clásicos argentinos y alicantinos (Elche-Hércules), mantiene que el River-Boca del domingo en el Bernabéu pierde interés con su «disparatado» traslado a Madrid.

P ¿Qué le parece que el «superclásico de las Américas» tenga que jugarse el domingo en Madrid por los graves altercados de Buenos Aires?

R Es muy triste porque estamos hablando de la Copa de los Libertadores de América y no de la Copa de Europa. Se tendría que haber jugado en cualquier lugar de Sudamérica, pero el traslado de sede demuestra lo mal que están Argentina y el fútbol argentino. El desastroso comportamiento de los hinchas fuerza este traslado a Madrid, que es un disparate y da mucha tristeza.

P ¿Teme que se puedan reproducir en la capital de España los incidentes de Argentina que obligaron a la suspensión del River-Boca Juniors?

R No, porque España está bien organizada. He vivido en Elche desde hace 20 años y no pasará a mayores el partido del domingo. En el Santiago Bernabéu se han disputado ya muchas finales y nunca ha pasado nada. Seguro que el dispositivo de seguridad es bueno en España y que el clásico será una fiesta, en lugar de un desastre como en Argentina.

P Es triste que un espectáculo deportivo de primer nivel se haya convertido en una cuestión de Estado de alta seguridad internacional...

R Hay mucha gente en Argentina que no puede ir a los estadios de fútbol por culpa de cincuenta o cien desalmados, lo que también demuestra lo mal que están la sociedad y el país. Creo que con todo este jaleo el partido ha perdido un poco de interés. No sé por qué lo llevan a Madrid. Al final todo se reduce al dinero y el negocio. No estoy conforme con este cambio de lugar de lo que debe ser un partido espectacular en Suramérica, por muchos argentinos que vivan en España, que acudirán al Bernabéu, además de otros aficionados en general.

P En el plano puramente deportivo, ¿tiene favorito para esta «final del siglo»?

R No hay favorito en estos partidos. He jugado muchos clásicos, Boca-River y Elche-Hércules, como tantos otros hay por el mundo, pero el pronóstico es incierto. Boca tiene mucho gol en su delantera con Benedetto y Tévez, mientras que River tiene más juego interior y por bandas y tácticamente está mejor. Es un partido al cincuenta-cincuenta por ciento.

P ¿Puede que los River-Boca de ahora tengan menos nivel que antes por el continuo éxodo a Europa de los jóvenes talentos argentinos?

R Antes apenas salían los jóvenes. Yo fui de los primeros cuando salí con 20 años hacia Elche. Ahora los ven de muy jóvenes y la Liga argentina se ha quedado huérfana de grandes figuras, que emigran desde muy jóvenes hacia España, Italia, Alemania o Inglaterra.

P Supongo que desde Ecuador seguirá de cerca las ligas argentina y española...

R Sí, claro. Para mí el fútbol español es el mejor del mundo. Me gusta mucho el que practica el Barcelona y también sigo con interés al Atlético de Madrid.

P También estará pendiente de lo que hace «su» Elche...

R También lo sigo. Tengo allí a mis nietos y mi hijo nació en Elche, donde voy a pasar las próximas fiestas de Navidad. Sé que el otro día salió del descenso y está en esa pelea. Igualmente, estoy pendiente del Hércules, que marcha tercero o cuarto. Tengo muchos amigos por esa tierra.

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