Nuevos tiempos para el Joventut d’Elx, que seguirá en la máxima categoría del fútbol sala tras absorber al equipo de la Universidad de Alicante, que se ha visto obligado a renunciar a su plaza en la Primera División al no poder asumir la profesionalización de la plantilla, uno de los requisitos que exige la Federación. Así, el conjunto ilicitano ha apostado por asumir la plaza de la UA y seguir en la elite con un proyecto competitivo que ha comenzado la cuenta atrás. Nada mejor que seguir entre las mejores en la temporada que se celebra el décimo aniversario de la entidad.

Además, el Joventut contará también con un filial en Segunda División, confirmando así su presencia en las dos categorías más potentes del fútbol sala en la campaña 2022/2023.

 El club ilicitano sigue trabajando en la planificación de la nueva temporada para confeccionar dos equipos competitivos, así como en su sección masculina y la base, y el lanzamiento de iniciativas como la campaña de abonos.

El equipo femenino de fútbol sala de la UA comenzó su andadura en 1998 y en 2011 logró el ascenso a Primera División. Desde entonces, con la permanencia como único reto, han conseguido situarse en la elite del deporte jugando la Copa de la Reina hasta este año, clasificándose como subcampeón de Liga en la temporada 2016/17 . Al final ha tenido que verse obligada a renunciar porque la entidad universitaria mantiene que los procesos de selección de personal de las administraciones públicas no permiten contrataciones como las que obliga la Federación Española.

Nueva imagen corporativa del club

«La nueva normativa de la Federación Española de Fútbol obliga a los clubes deportivos a profesionalizar, mediante contrato, tanto a las jugadoras como al cuerpo técnico de los equipos que compiten en primera división. Tras meses de estudio y análisis de la cuestión en busca de alternativas, la Universidad de Alicante se ha visto obligada a prescindir de su equipo de Futbol Sala Femenino en División de Honor», explicó en un comunicado de la universidad alicantina.

La UA pasará a jugar ahora en la categoría federada amateur tras once años en la elite del futbol sala. Tras nacer en 1998 ha ido escalando en las divisiones, hasta consolidarse en la Primera División. Referente en mundo deportivo femenino la Universidad de Alicante no ha podido sortear este gran cambio en el fútbol sala. Un cambio que sin lugar a duda es para mejor pero que deja un vació que ahora se encarga de ocupar con toda la ilusión el Joventut d’Elx.

De esta forma, el conjunto ilicitano podrá participar, por segunda vez en su historia en Primera División pese a no haber podido conservar la categoría la pasada temporada e incluso sus jugadoras podrán beneficiarse de un convenio para acceder a una serie de becas en la UA.

Así, el club ya puede realizar la planificación de la plantilla para la próxima temporada con el objetivo de luchar por la permanencia en la máxima categoría en su centenario. Máxima ilusión en la entidad que preside Esther Menárguez que ya tiene por fin la luz verde de la Federación Española para ocupar la plaza que deja la UA. Comienza una nueva y apasionante etapa para el conjunto ilicitano y una nueva oportunidad tras el duro descenso de la pasada temporada.