El coste de la luz en el mercado mayorista (conocido como «pool») ha caído un 36% en el mes de abril y es el más barato en los últimos seis años. El precio en el «pool» se ha desplomado por la bajada de un 17% de la demanda por el parón de la industria, la reducción del coste del petróleo y el gas, y el aumento de las energías renovables. La factura de las familias de la Comunidad que tengan contratada la tarifa regulada PVPC (que es la de los consumidores más vulnerables, ya que da acceso al bono social) se va a reducir un 21%. Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado que la bajada no se va a trasladar a los clientes con tarifa fija porque «las comercializadoras no han aplicado a sus ofertas y renovaciones de precio» la reducción del coste de la luz.
El precio de la electricidad en el mercado mayorista cerró en abril a 17,65 euros el megavatio hora (?/MWh). Según subraya la consultora energética Grupo ASE, es el nivel más bajo del coste de la luz desde febrero de 2014 y el segundo más barato desde julio de 2007. «La caída de la demanda ha sido colosal. El consumo ha bajado un 17,4% respecto a abril de 2019 y ha sido un 15% menor al de abril de 2014, el mínimo alcanzado durante la crisis económica de 2008 a 2014», explican los analistas de ASE. «El precio de la luz ha descendido un 36,4% desde marzo y es un 65% más bajo que el registrado en abril de 2019 (50,41 ?/MWh)», añaden.
El consumo de la luz ha aumentado un 28% en los hogares a causa de la cuarentena, pero ha caído en picado en la industria por el parón de la actividad decretada por el Gobierno en el momento más duro de la crisis sanitaria. Esto ha provocado que apenas haya habido hueco para la producción con gas y carbón (al no hacer falta). A ello se ha unido que las cotizaciones de las materias primas de las que se aprovisionan las centrales de ciclo combinado (gas) y térmicas (carbón) se encuentran en mínimos históricos. Esta «tormenta perfecta», según los expertos, «ha hundido los precios».
Por su parte, las energías renovables (que abaratan el recibo) han supuesto el 48,3% de la producción. Destaca el crecimiento de la producción hidráulica, que ha aumentado un 51,4% respecto a hace un año. Abril de 2020 ha sido uno de los más lluviosos desde que existen registros y la hidráulica ha aportado un 17,5% al mix. Además, los pantanos están al 65% de su capacidad. La producción fotovoltaica ha crecido un 75,5% y ha elevado su aportación al mix al 7%. Por el contrario, la escasez de viento ha reducido la producción eólica hasta el 26% de la generación total, muy por debajo de la media en un mes de abril.
El punto negativo es para los consumidores con tarifas fijas. La OCU advierte que los clientes con una tarifa fija en el mercado liberalizado no se beneficiarán de la bajada del precio de la luz y verán como el confinamiento les supondrá una factura más elevada, un sobrecoste en abril de 13 euros por el confinamiento. La organización recomienda que los usuarios comprueben si su tarifa es atractiva y en caso contrario se pasen a la regulada PVPC. En esta tarifa, el coste depende en un 40% de la evolución del mercado mayorista y en un 60% de los impuestos y peajes que marca el Gobierno.